La siembra de más de dos mil 200 hectáreas de arroz en Ciego de
Ávila desde el inicio de la primavera hasta la fecha sitúa al
territorio en condiciones de sobrepasar su programa anual del grano.
Agricultores estatales y privados completarán el fomento de
cuatro mil 170 hectáreas en lo que resta de año, en momentos que el
precio del cereal supera los mil 200 dólares la tonelada.
Carlos de la Torre, jefe de este cultivo en la provincia, informó
que las plantaciones se realizan, en su mayoría, con posturas
trasplantadas para lograr buenos rendimientos, además del empleo de
suelos bajos de fácil anegación.
En Ciego de Ávila existen 81 cooperativas de producción
agropecuaria y de crédito y servicios con experiencia en la cosecha
del grano, entre las cuales se distingue la Mártires del Granma, del
municipio de Ciro Redondo.
Su colectivo acopió 600 quintales por hectárea en la primera
cosecha de este año sin utilizar fertilizantes químicos, y espera
mantener la misma producción en las áreas recién sembradas.
Erinaldo Bello, presidente de la mencionada cooperativa, aseguró
que de garantizarse abonos industriales ellos pueden recolectar
hasta 900 quintales por hectárea.
En los arrozales avileños predominan variedades chinas y cubanas,
que son resistentes a plagas y enfermedades y de alto potencial
productivo.
Con los precios de este cereal en el mercado mundial, el Estado
cubano tiene que invertir cuantiosos recursos monetarios de cada año
para garantizar el arroz que consumen los avileños solamente por la
canasta familiar.