El presidente de Venezuela, Hugo Chávez,
declaró hoy que su país ya se siente integrante del Mercado Común
del Sur (MERCOSUR) y lo que falta para ello depende de los tiempos
legislativos.
A su llegada a esta capital para una cumbre trilateral con los
mandatarios de Argentina y Brasil, Cristina Fernández y Luiz Inacio
Lula da Silva, dijo que su país actúa dentro de esa institución
mientras aguarda por la aprobación de los congresos de Brasil y
Paraguay.
Preguntado sobre las próximas elecciones en Estados Unidos y las
perspectivas de un mejoramiento de las relaciones, dijo que en
Venezuela no se hacen ilusiones con nadie, porque se trata del
imperio y por eso propugna la máxima de ver para creer.
Ojalá, sea quien sea el nuevo presidente de Estados Unidos a
partir del próximo año, entienda que en América del Sur hay una
revolución, un proceso en marcha que es democrático, pacífico y
legítimo y no le queda más que respetarlo y buscar relaciones de
iguales, apuntó.
Dijo que los países latinoamericanos no se inmiscuyen en los
asuntos de Estados Unidos y esperan que ese país, como potencia, no
se meta en los de esta región, al tiempo que calificó de amenaza
para el Sur la IV Flota y dijo que el próximo mandatario debería
retirarla.
Remarcó que esa poderosa presencia naval norteamericana en las
aguas sudamericanas pretende controlar lo que ya no pueden, como lo
advirtió, dijo, el líder cubano Fidel Castro, en una carta que le
enviara hace un año sobre los procesos en curso en el subcontinente.
Recordó que en Latinoamérica se instaló desde hace siglos, pero
sobre todo en el XX, el modelo económico más desigual del planeta,
con sus minorías enriquecidas controlando el estado, los gobiernos,
los congresos, y pueblos echados a la miseria.
Chávez dijo no haber tenido nunca grandes ilusiones en las
reuniones de pobres con ricos, como caracterizó la reciente sesión
de la Ronda de Doha, y dijo aferrarse al pensamiento del caudillo
oriental José Artigas cuando dijo: "no esperemos nada, sino de
nosotros mismos".
Los países ricos no van a hacer nada para cambiar el mundo,
porque ellos se sienten dueños del mundo, sentenció el mandatario
venezolano.
Dijo que la salida está en hacer aquí en el Sur lo que se espera
de esta reunión en Buenos Aires: hablar, planificar y tomar
decisiones políticas y económicas para unirse.
Remarcó que el Banco del Sur, PETROSUR y otros proyectos deben
convertir a Sudamérica en una potencia alimentaria, energética y
financiera porque cuentan con todo para hacerlo.