Odalys
Ruiz Fuentes es una de las más sobresalientes del país en la entrega
de propinas. Manifiesta estar orgullosa de la admiración que
despierta ese noble gesto, tanto en el entorno laboral como en el
barrio.
Siempre hay alguien que se lo cuestiona y pone reparos mezquinos,
pero son más los que enaltecen el altruismo y te colman de elogios,
reconoce la joven cardenense, quien labora en el Aeropuerto
Internacional Juan Gualberto Gómez desde la fundación de la terminal
aérea.
Al principio algunas de mis amistades no entendían eso de que me
despojara de parte de lo mío para dárselo a otros, pero con el
tiempo lo ven con otros ojos y comprenden mejor que sea aportadora
voluntaria. Es normal que ocurra, es humano.
La hace feliz sobremanera el reconocimiento de la familia y en
particular de sus hijos. "El aliento de mis seres queridos es la
mejor inspiración para seguir adelante. Ellos saben las razones que
me estimulan a contribuir con este aporte material al programa de
lucha contra el cáncer y el programa materno infantil". Odalys es
una muchacha alegre y locuaz, muy conocida y respetada en el
aeropuerto. Llama la atención
por su espíritu generoso, de gente con quien siempre se puede
contar y dispuesta a auxiliar a los demás.
Desde el surgimiento mismo de este movimiento entrega cada año
más de 2 000 CUC de sus propinas. Asegura que no desembolsa sobrante
alguno. "Yo comparto lo que tengo, por convicción, nadie me reclama
nada ni lo hago para emular. Me satisface pensar que mi modesto
aporte puede contribuir a mantener con vida a un niño en cualquier
hospital. Ojalá y pudiera entregar mucho más".
Odalys, secretaria del Partido en el aeropuerto, predica con el
ejemplo personal y de ayudar a la Patria, cada quien desde su puesto
de trabajo.
"De visita en algunos hospitales del país, salas oncológicas y
pediátricas, he visto de cerca el padecimiento de enfermos y
familiares. Por eso entrego todo cuanto pueda, consciente además de
que así implico a mis compañeros de trabajo".
Miles de trabajadores en toda Cuba, en su mayoría vinculados a la
esfera del turismo, se ven atraídos por el programa Mi aporte por
la vida y otorgan parte de sus ingresos por concepto de propinas
para contribuir a la compra de medicamentos.
Ella habla con admiración de todos aquellos que participan en
esta especie de movimiento. Conserva en su memoria no pocas
experiencias vividas en centros de salud, donde personas aquejadas
de enfermedades difíciles se sobreponen con valentía.