Irán, los cinco miembros
permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania solicitaron
la mediación turca en el diferendo sobre el programa nuclear de
Teherán, informó hoy el ministro del Exterior Ali Babacán.
El papel de Ankara sólo será el de consolidar y facilitar en cierto
sentido las negociaciones de la República Islámica con Estados Unidos,
Francia, Gran Bretaña, China y Rusia (G-5), así como con Alemania,
insistió Babacán.
Al respecto, el jefe de la diplomacia turca evitó el calificativo
de misión oficial de su país como mediador, tras entrevistarse en
Estambul con el negociador iraní para asuntos nucleares, Said Jalili,
quien hizo una escala técnica a su regreso de una reunión en Ginebra.
En la referida ciudad suiza, Jalili se entrevistó con el Alto
Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la
Seguridad Común, Javier Solana, quien esperaba respuesta a una
iniciativa presentada a Teherán, en junio pasado.
No hay motivos para ser pesimistas, comentó esta jornada Babacán,
en alusión al modesto resultado de las conversaciones en Ginebra,
donde el G-5 y Alemania insistieron en presentar incentivos para que,
a cambio, la República Islámica desistiera de su programa atómico.
Frente a las acusaciones de Washington de un supuesto intento de
desarrollar el arma nuclear, Irán reitera el carácter pacífico de ese
programa y su derecho a enriquecer uranio como país firmante del
Tratado de No Proliferación.
Sin embargo, la secretaria de Estado norteamericana, Condeleezza
Rice, amenazó esta jornada con llevar nuevamente al Consejo de
Seguridad de la ONU el tema de las sanciones contra Teherán, si en dos
semanas no presenta plan alguno para desactivar su programa atómico.
Medios de prensa locales destacaron la presencia de un
representante estadounidense en las pláticas de Ginebra, aunque éste
se abstuvo de participar en los debates.