Varadero es una playa apetecible en cualquier época del año,
máxime en los meses de vacaciones, cuando diariamente se aglomeran
aquí gran cantidad de bañistas, volumen que llega a ser entre 80 000
y 100 000 los fines de semana.
A juicio de Ernesto Calero Hernández, presidente del Gobierno en
el municipio, esta playa es la Olimpiada de muchos veraneantes.
Vienen de todas partes de Cuba, con el mismo entusiasmo con que lo
pueden hacer los atletas en una magna cita deportiva.
Naturalmente, este acontecimiento ocupa la atención de las
autoridades del territorio, con la responsabilidad de poner orden en
la playa y su entorno y atender a esa multitud como es debido.
Comentó el titular de la Asamblea Municipal del Poder Popular que
el inicio del plan de verano tendrá lugar esta vez en el añejo
escenario de las Ocho Mil Taquillas, donde se realizarán diversas
actividades culturales y deportivas para todas las edades. El
programa concibe algo similar en los Consejos Populares de Boca de
Camarioca y Santa Marta.
Animarán el verano de manera especial los bailables en el recién
remozado Anfiteatro, donde se presentarán agrupaciones musicales
cada fin de semana. También habrá opciones recreativas en las
pequeñas playas de Boca.
Dijo Calero que además de los establecimientos tradicionales que
ofertan servicios en moneda nacional, este año se agregaron 25
puntos para la venta de productos gastronómicos ubicados en la
avenida Playa, con los cuales garantizan la demanda de los bañistas.
Con el propósito de cuidar la playa y crear mejores condiciones a
los visitantes, han establecido 40 áreas para el parqueo con los
consiguientes reguladores del tránsito, y dos brigadas bajo el mando
de Comunales-Arentur con la misión de limpiar la zona. Casi 300
salvavidas tendrán a su cargo la seguridad de los bañistas. Además,
se reforzará el transporte sobre todo en las líneas
Varadero-Cárdenas y Varadero-Matanzas.
Aunque muchos cubanos encontrarán su mejor opción veraniega en
familia o en lugares cerca de casa, nadie pone en duda el inmenso
regocijo que significa disfrutar en estos cálidos meses, al menos
por unas horas, de los atributos de la linda playa de Varadero.
Quienes se atrevan a visitarla por primera vez quizás experimenten
una alegría similar a la de cualquier atleta en la mayor cita
deportiva.