El gobierno del presidente George W.
Bush obstaculiza investigaciones sobre historias de heroísmo de
militares en Iraq y Afganistán, las cuales inventó para buscar apoyo
en la opinión pública nacional, señala hoy el diario The New York
Times.
Funcionarios de la administración muestran amnesia, al parecer
autoinducida, a la hora de establecer responsabilidades en torno a
los casos de Pat Tillman y Jessica Lynch, quienes fueron presentados
como símbolos de la llamada cruzada antiterrorista, advierte un
editorial del rotativo.
Según la fuente, además del silencio oficial, resulta sospechosa
la ausencia de documentos probatorios de las mentiras esgrimidas
para potenciar el patriotismo de los norteamericanos.
Es curioso que en cientos de mensajes electrónicos y otros
materiales entregados por la Casa Blanca estén ausentes indicios de
la manipulación, comenta el influyente periódico.
De acuerdo con el Times, el más reciente episodio de obstrucción
gubernamental apareció en la Cámara de Representantes, cuando altas
figuras políticas y militares no aportaron nada nuevo en sus
comparecencias ante investigadores de esa instancia del Congreso.
El diario neoyorquino recuerda este miércoles las historias del
cabo Tillman y la soldado Jessica Lynch.
Tillman supuestamente murió combatiendo en Afganistán, acción que
incluso le valió una importante condecoración militar, la Estrella
de Plata.
Sin embargo -explica el rotativo-, dicho integrante del segundo
batallón del 75 Regimiento de los Rangers en realidad falleció por
el fuego cruzado de sus propios compañeros de armas.
Por su parte, Lynch apareció ante los estadounidenses como una
valiente que peleó al estilo de Rambo, antes de ser herida en
combate y luego tomada prisionera, agrega el Times.
Si bien la ex miembro del Ejército recibió lesiones durante una
emboscada, estas en verdad ocurrieron al accidentarse el vehículo en
el que viajaba, apunta la fuente, la cual recuerda que los iraquíes
la hospitalizaron y la atendieron con esmero.