Sin
esperar por los resultados eliminatorios del próximo fin de semana,
la Federación Internacional de Voleibol (FIVB) anunció ayer que
otorgó a Japón el "wild card" como el sexto equipo para la final de
la Liga Mundial, del 23 al 27 de este mes, en Río de Janeiro.
El año pasado Francia (7 victorias y 5 derrotas, con índice de
1.028 en tantos a favor y en contra), fue la beneficiada para
concurrir a la discusión de medallas en Katowice, Polonia, a pesar
de que Cuba exhibía 7-5-1.058, una pequeña diferencia a su favor,
pero, diferencia al fin. Los franceses ocuparon el sexto y último
peldaño.
Y recordarán que en el 2006 —aunque Cuba (10-2) tenía el mejor
balance de partidos ganados y perdidos entre los elencos con
posibilidades de obtener ese boleto— al terminar la clasificatoria
le concedieron la gracia a Italia (7-5). Como elenco de inestable
paso en preliminares, el descalabro galo sobrevino en la final al
caer al sótano, con la esperada crítica de quienes se opusieron de
inicio a tan descabellado favoritismo.
Ahora la FIVB repite el desaguisado. Al favorecer a Japón, de
pobre labor con cuatro victorias y seis reveses en esta etapa del
evento, se colige la prevalencia del factor económico a la hora de
ponerle el cuño a la decisión. Inclinó la balanza a favor de los
nipones dado su peso específico como organizadores de eventos al
estilo de las Copas Mundiales pero, no tuvo en cuenta que, en la
actualidad, no exhiben resultados sobresalientes en la Liga, Grand
Prix, Campeonatos Mundiales y Juegos Olímpicos.
En esta ocasión, el sexto invitado a la ciudad balneario debía
ser el segundo lugar de mejores resultados en eliminatorias. Ahí
entraban en la disputa Francia (6-4), Cuba (5-5), China (5-5) y
Serbia (5-5), aunque para los nuestros resulte difícil ganar este
viernes y domingo los dos partidos contra los bambinos. La prematura
determinación impuesta por la FIVB desestimó las posibilidades de
los planteles mencionados.
Rusia (9-1), ya consiguió su pase a la finalísima, como lo hizo
Brasil (8-2, líder de la A, sembrado por ser sede de la vuelta
conclusiva). Al encabezar los auriverdes su poule, el ocupante del
segundo peldaño, Bulgaria (6-4), también viajará a Río. Estados
Unidos (9-1), puntero del cuarteto C, igualmente clasificó, mientras
Polonia (7-3) parece seguro por la zona D. Japón completa el
sexteto.
Si después de tanto esfuerzo sobre el terreno, la cúpula de la
FIVB decide el "wild card" de dedo, ¿qué mensaje les envía a los
integrantes de estas selecciones? ¿Al otorgárselo a Japón tomó en
cuenta cómo descenderá la calidad del espectáculo en Río? ¿Cuántas
veces más se repetirá la historia?