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Eficiencia energética y ahorro: mucho por hacer
María Julia Mayoral
ma.julia@granma.cip.cu
En los últimos dos años Cuba ahorró más de 500 millones de
dólares por reducción del consumo de combustible, como resultado de
la aplicación de los programas inherentes a la Revolución
Energética; sin embargo, para el Gobierno de la Isla todavía la
eficiencia nacional en el uso de los recursos energéticos dista de
ser óptima.
La
rehabilitación de las redes ha permitido eliminar el 88% de las
zonas de bajo voltaje.
Pormenorizada información acerca del tema recibieron ayer los
diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular, a partir de las
evaluaciones presentadas por Yadira García Vera, ministra de la
Industria Básica.
El mencionado monto financiero se expresa en ahorros relativos,
señaló Carlos Lage, vicepresidente del Consejo de Estado y
secretario del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros. No es que
se disponga de 500 millones de dólares, aclaró, sino que parte del
crecimiento de la economía pudo compensarse con el ahorro de
combustible, pues en esos mismos años (2006 y 2007) crecieron el
transporte de carga y de pasajeros, el número de fábricas en
funcionamiento¼ , y por tanto, los
gastos, pero no todo fue a expensas de más consumo de combustible.
La Revolución Energética, consideró Lage, muestra hoy como
principales resultados la supresión de los apagones por déficit de
generación eléctrica, el aumento del abasto y la estabilidad del
servicio, y el mejoramiento de las condiciones de cocción en los
hogares, al eliminarse casi totalmente el queroseno como combustible
doméstico y la dependencia que tenía la cuota de este producto y del
GLP (gas licuado de petróleo), los cuales eran repartidos de manera
insuficiente y regularmente incompleta.
También las familias resultan beneficiadas por la entrega de
otros efectos electrodomésticos eficientes y modernos
(refrigeradores, ventiladores, televisores¼
), que sustituyen equipos gastadores y con alto deterioro por los
años en explotación.
No obstante, reconoció, en este proceso ha habido deficiencias y
errores. Recuerden, ilustró, las hornillas que se distribuyeron y
hubo que recogerlas pues no tenían la fortaleza necesaria, y las
jarras para hervir agua que en vez de ahorro provocaron aumentos en
los gastos. Entre las cuestiones negativas inscribió, además, la
demora en la distribución de los televisores y problemas de calidad
en refrigeradores.
PRIORIDADES
Énfasis especial reclamó el dirigente en el cumplimiento de las
tareas relacionadas con la transformación del sistema eléctrico para
lograr generación eficiente. Lo planeado, comentó, no está completo:
hay termoeléctricas que ya en estos momentos no deberían estar
funcionando regularmente y lo están haciendo.
La potencia instalada en los grupos electrógenos de fuel oil,
prosiguió, representa solo 518 MegaWatt y debe llegar a 977,6; hay
que incrementar la capacidad de generación con gas, utilizar los
equipos para generar con diesel solo en el tiempo imprescindible
para el cual están concebidos. Queda mucho por avanzar para tener un
sistema eléctrico eficiente, y no lo vemos todavía, aunque se haya
progresado en estos últimos dos años, sopesó.
Resulta indispensable completar el trabajo en las redes, en
beneficio de la población y por la reducción del consumo que debe
proporcionar. Hasta ahora, evaluó, esas reparaciones no han tenido
el efecto esperado, pues, aunque las redes han recibido mejoras, al
crecer la generación aumentaron las pérdidas en el transporte de
energía.
Faltan por instalar equipos de bombeo de agua y está pendiente
parte de los nuevos efectos electrodomésticos. Lo mismo sucede con
el cambio de motores en los equipos de transporte de carga; tampoco
han podido ponerse en funcionamiento camiones y camionetas previstos
en el programa, cuya adquisición en el exterior se retrasó. En todo
lo que es reposición de equipos por otros más eficientes, resumió,
hay un tramo importante por avanzar.
En cuanto a los efectos electrodomésticos, aseguró, el país
realizó un gran esfuerzo y lo va a seguir haciendo para que existan
las piezas de repuesto en los talleres de reparación, dotados de las
herramientas y el equipamiento necesarios. Se vuelve un asunto de la
mayor importancia, destacó, que los organismos encargados,
principalmente Comercio Interior (MINCIN) y la Industria Sidero
Mecánica (SIME), aseguren el mantenimiento de un servicio estable y
con calidad.
SUBSISTE EL DERROCHE
No se ha acabado el despilfarro, el mal uso de los combustibles,
hay mucho por ahorrar todavía mediante la organización, la
eficiencia, el control, apreció el integrante del Buró Político. Es
muy difícil, ejemplificó, que una supervisión energética deje de
encontrar en cualquier entidad problemas que de resolverse
significarían reducción del consumo.
En el ahorro, dijo Fidel desde los primeros momentos de la
Revolución Energética, tiene el país la fuente principal de
recursos, si esto era así hace tres años o más cuando él lo
concibió, hoy este concepto posee mucha más trascendencia, pues el
combustible cuesta casi tres veces más que entonces, ponderó Lage.
Los conceptos que sustentan la Revolución Energética, concluyó,
son de carácter permanente, porque permanentemente hay que estar
buscando inversiones, medidas de ahorro, de organización para
reducir el consumo de combustible.
RESPUESTAS A LAS INQUIETUDES DE
LOS DIPUTADOS
Múltiples preguntas, dudas e inconformidades fueron expresadas
por los parlamentarios. Acerca de las posibilidades de extender el
servicio eléctrico, Vicente La O, director general de la UNE,
explicó que en estos momentos la primera prioridad es erradicar las
zonas de bajo voltaje y en segundo lugar se seguirá atendiendo la
estandarización de las redes en los bateyes azucareros.
No obstante, informó, en localidades donde fueron eliminadas las
fluctuaciones de voltaje y, en general, avanza la rehabilitación,
también prosiguió la electrificación. Hoy, recordó, el 96% de la
población cubana cuenta con el servicio, lo cual representa un 1%
por encima del porcentaje existente al cierre del 2007.
Mediante el Sistema Electroenergético Nacional, aclaró, resulta
imposible llegar a la totalidad de las viviendas ubicadas en zonas
intrincadas, entre ellas las montañosas. La alternativa en esos
casos es emplear grupos electrógenos, pequeñas mini eléctricas,
generadores eólicos¼ En algunos sitios
han sido montados esos medios, pero en estos momentos no hay
posibilidades de satisfacer todas las necesidades.
Para las zonas rurales con más bajo nivel de electrificación del
país, ubicadas en las provincias de Holguín, Las Tunas, Guantánamo y
Granma, indicó, hay un programa específico de solución, concebido
hasta el año 2011. Sobre el tema Yadira insistió en que
objetivamente no puede hacerse todo a la vez, aunque son
comprendidos los reclamos de la población.
También en respuesta a los diputados, la Ministra argumentó que
están en estudio las soluciones para atender el mal estado de las
instalaciones eléctricas en el interior de las viviendas. Como parte
de la Revolución Energética no es factible asumir esas labores, la
alternativa será vender cables y otros recursos en moneda nacional y
en divisas a la población y la creación de brigadas que presten el
servicio de reparación a precios módicos.
Sobre el alumbrado público, Vicente La O comunicó que el plan
aprobado concibe el cambio de 162 000 luminarias, entre el segundo
semestre del 2007 y finales del 2009, por un costo superior a los 14
millones de dólares. Hasta el momento se han sustituido el 20% y a
fines de este año el porcentaje debe aumentar a 33. Por las
disponibilidades materiales y financieras actuales, la prioridad no
puede ser aumentar este servicio, sino eliminar luminarias fundidas
o con funcionamiento defectuoso, a partir de las decisiones
adoptadas en coordinación con los consejos de la administración.
Enrique Gómez Cabeza, jefe del Programa Nacional de los
Trabajadores Sociales, informó que hay atrasos en las entregas de
televisores por problemas en la producción aún sin resolverse. Con
el ritmo actual de ensamblaje —400 diarios—, llevaría años hacer la
sustitución; así que hay que buscar soluciones para los
aproximadamente 900 000 por reponer.
Según reiteró, solo está previsto entregar refrigeradores nuevos
cuando funcionan los que se van a retirar y aclaró que, aunque un
primer censo recogió información acerca de las lavadoras domésticas,
estos equipos no fueron incluidos en el plan, pues el reducido
ahorro energético que podrían aportar no justifica su inclusión
dentro de los planes de la Revolución Energética.
Fernando Acosta, ministro del SIME, dijo que los equipos
distribuidos ascienden a 26 500 000. Y, según argumentó, en aquellos
lugares donde existan atrasos en las reparaciones, falta de piezas,
problemas de calidad, las causas están en el deficiente trabajo de
la gente, porque el programa cuenta con los recursos necesarios.
Acerca de la posibilidad de aumentar el combustible dado a las
familias en calidad de reserva (queroseno o GLP), Yadira explicó que
la cuota establecida no crecerá, pues el país perdería el beneficio
económico-financiero de haber pasado a la cocción con electricidad.
Solo en caso de interrupciones eléctricas sostenidas que justifiquen
el consumo de la mencionada reserva, esta se repone antes del plazo
fijado, previa certificación por parte de los técnicos de las
organizaciones básicas eléctricas. |