Las ideas y programas que benefician hoy a millones de cubanos no
han estado exentos de complejidades que una vez detectadas esperan
ser resueltas. Tal realidad se manifiesta en las transformaciones
del sector educacional y en la Revolución Energética; temas en los
que enfatizaron los diputados de la comisión de Atención a la
Juventud, la Niñez y la Igualdad de Derechos de la Mujer.
Así fueron expuestas las insuficiencias en el personal docente de
las Secundarias Básicas, nivel en buena medida asumido por
profesores generales integrales (PGI), aún en formación y todavía en
número deficitario. Al respecto, Bertha Fernández González,
viceministra de Educación, reconoció que la idea de propiciar un
tutor por cada PGI no se ha podido lograr debido al déficit de
profesores experimentados. Solo en Ciudad de La Habana, el 81% de
los maestros de Secundaria Básica son PGI, refirió.
Un incremento en las horas de preparación metodológica, la
designación de profesores con ejercicio para dedicarse,
exclusivamente, a la tutoría de hasta ocho PGI, y la rotación de
asignaturas, deberán mejorar la situación en las 1 020 secundarias
del país, indicó la Viceministra.
La merienda escolar, con irregularidades en su calidad y
distribución, fue otro de los asuntos abordados. Y aunque la mayoría
de los alumnos coge la merienda, ello no es garantía de que la
ingieran, precisaron los diputados.
El comportamiento del programa de la revolución energética fue
también discutido. Entre los pormenores de las tareas se conoció que
la distribución de televisores es la más atrasada (al 21%).