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El Grupo de Países Emergentes, pidió hoy la intervención de la
Organización de Naciones Unidas (ONU) para solucionar la crisis en
el aumento generalizado en los precios de los alimentos en el mundo.
Conocido también como el Grupo de los Cinco (G-5), los
representantes de China, Brasil, México, Sudáfrica y la India,
plantearon ante los ocho países más industrializados del mundo (G-8)
la necesidad de que la ONU trate de resolver la crisis del
encarecimiento de los alimentos.
El presidente de México, Felipe Calderón, dijo que era necesaria
la intervención de la comunidad internacional para desarrollar con
urgencia mecanismos útiles que hagan frente al alza de los precios y
aseguren el desarrollo para los estados más empobrecidos.
La subida del costo global de los alimentos representa un nuevo
desafío para la lucha contra la pobreza y el hambre, señaló
Calderón, al leer la declaración conjunta del G-5.
Por su parte, el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva,
dijo que existe un alza generalizada de productos como el maíz o el
trigo.
El mandatario chino, Hu Jintao, consideró injusto culpar a los
países con las mayores poblaciones del mundo por este problema y
destacó que hace falta aumentar la cooperación en aspectos prácticos
como la siembra, combate de plagas y acumulación de reservas de
granos.