"Resulta imperiosa la lucha por la promoción de una imagen
objetiva y justa de la realidad de nuestros países. Debemos exigir
que se transmita la verdad. Plantear nuestra alternativa. Defender
nuestros derechos. El Nuevo Orden Mundial de la Información y las
Comunicaciones, silenciado 20 años atrás, no es una utopía, es un
reclamo esencial de nuestros pueblos, que cobra hoy mayor vigencia."
Así expresó este jueves el canciller cubano Felipe Pérez Roque
durante su discurso en la VII Conferencia de ministros de
Información de los Países No Alineados, que concluye hoy en la Isla
de Margarita, estado venezolano de Nueva Esparta.
En el segmento de alto nivel, presidido por el líder bolivariano
Hugo Chávez, el Jefe de la diplomacia en la Isla señaló que "el
injusto y antidemocrático orden internacional a que se nos pretende
someter es responsable del abismo que separa al Norte del Sur en
cuanto a la producción, acceso y flujo de la información. Sustenta,
además, la violación del derecho de nuestros pueblos a recibir
información veraz y objetiva, requisito imprescindible al ejercicio
de la libertad y la libre determinación".
Asimismo, enfatizó en que el control monopólico de la información
y las comunicaciones constituye un componente estratégico en los
planes de dominación imperial. Para los Países No Alineados, la
reivindicación del acceso, la producción autóctona y un flujo de la
información verdaderamente democrático, responsable y objetivo,
constituye un objetivo irrenunciable.
El titular antillano explicó que somos bombardeados continuamente
por falsas alegaciones fabricadas contra países miembros del
Movimiento y que nuestras realizaciones son muchas veces
tergiversadas o simplemente silenciadas. "La mentira se vuelve
práctica cotidiana. Se intenta interpretar y escribir la historia
desde la óptica de los poderosos. Se pretende justificar la
discriminación y la xenofobia. Se crean reflejos condicionados a
través de los medios. Se convierte a las víctimas en victimarios. Se
colocan etiquetas y se crean estereotipos a conveniencia. Se
idiotiza y se miente", apuntó.
Igualmente se refirió a que la manipulación política de la
información y la complicidad de los medios de comunicación alcanzan
niveles extremos. Se articulan campañas con fondos multimillonarios
y los más sofisticados medios. "Se trata del terrorismo mediático,
el arma más efectiva del Siglo XXI en manos de los poderosos",
sentenció Pérez Roque.
"Cuba conoce bien sus efectos. Por casi cinco décadas, ha debido
también enfrentar la agresión radioelectrónica en contravención de
las normas del Derecho Internacional. Desde los Estados Unidos de
América se emiten semanalmente hacia Cuba casi 2 000 horas por 30
frecuencias diferentes, utilizando 19 emisoras de radio y
televisión. En estas transmisiones, que crean interferencias
perjudiciales a nuestros servicios nacionales, se llama a la
violencia y al asesinato, se falsifican y tergiversan los hechos, se
promueve la destrucción del orden constitucional legítimamente
establecido y refrendado por el pueblo cubano."
Puntualizó además que "ante una crisis energética y alimentaria
de alcance global, la idea del consumismo como sinónimo de bienestar
continúa siendo irresponsablemente alentada. Los noticieros,
espacios publicitarios y prácticamente toda la llamada industria del
entretenimiento, imponen un modelo único de sociedad, depredador del
medio ambiente y empobrecedor de las mayorías, a la vez que
demonizan cualquier propuesta alternativa al orden vigente".
Y se preguntó: "¿Cómo alcanzar el objetivo de una sociedad
informada, participativa e incluyente, si en los países
subdesarrollados casi 800 millones de personas siguen siendo
analfabetas y 80 millones de niños no asisten a la escuela
primaria?".
"La abismal diferencia en el acceso a Internet entre las naciones
del Sur y del Norte industrializado nos vuelve a colocar en
desventaja. Hoy, más de la mitad de los usuarios de Internet en el
mundo son de Norteamérica y Europa, pese a que la población de estas
regiones no sobrepasa un sexto de la población mundial."
Comentó que los contenidos que circulan en el ciberespacio son
elaborados abrumadoramente en los países del Norte y el 95% de ellos
en solo diez lenguas. Resulta imperativo poner la Internet bajo el
gobierno de una institución multilateral y democrática, que promueva
la cooperación internacional y la igualdad de acceso a la tecnología
para todas las naciones.
Finalmente dijo que el Movimiento de Países No Alineados debe
trabajar mucho más en el ámbito de la información, "en cumplimiento
del mandato que nos fuera planteado por nuestros Jefes de Estado y
de Gobierno en la Cumbre de La Habana".
"Unamos fuerzas para defender nuestro derecho a la verdad, a un
orden internacional justo y equitativo y a la solidaridad
internacional", apuntó Felipe.
La VII Conferencia de Ministros de Comunicación del Movimiento de
Países No Alineados (COMINAC), que desde el pasado miércoles reúne a
delegaciones de países miembros y observadores de NOAL debe concluir
con la aprobación de la Declaración de Margarita, que propone
estrategias y acciones para revertir el actual orden informativo.