Los seis mejores luchadores juveniles cubanos del momento piensan ya por entero en los Campeonatos Mundiales, en Estambul, Turquía, a partir del 28 de julio, pues el último domingo quedó atrás para ellos el panamericano, en Cuenca, Ecuador, donde ganaron cinco medallas de oro y una de plata.

"Les fue bien. Se invirtieron los papeles de hace un año, en que la libre ganó tres de oro, y la grecorromana dos", comentó Luis de la Portilla, uno de los metodólogos de la Comisión Nacional, en declaraciones para los lectores de Granma.

El desempeño soñado aconteció por los tres del estilo greco: Maikel Anache (esta vez vencedor en los 60kg, y no en los 55 como en el 2007), Reinier Lescay (66) y Yasmani Acosta (120) fueron los que se adueñaron de la cima, para felicidad total del entrenador Juan Carlos Linares.

En la libre, dirigida por Julio Mendieta, Alejandro Valdés (60) y Elier Romero (120) hicieron que otra vez se escuchara nuestro Himno Nacional, como lo consiguieron un año atrás, en tanto Lázaro Montes de Oca (66) quedó con plata.

La delegación cubana volvió a ser reducida, no incluyó representantes en cuatro de las siete divisiones de cada estilo masculino, y tampoco en ninguna de la lucha femenina.

Estados Unidos, como era esperado, terminó en primer lugar.

Cuenca resultó clasificatorio para Estambul.