,
segundo largometraje del realizador Chris Graus, aborda la relación
de una anciana profesora de piano con una joven presidiaria acusada
de asesinato, a la que intenta redimir a través de la música, y
cuenta en los roles protagónicos con las actuaciones de Mónica
Bleibtreu y Hannah Herzsprung. Este filme llega avalado por 16
premios en Alemania y en el exterior, entre ellos, el máximo lauro
en el Festival de Shanghai y el de la Federación Internacional de la
Prensa Cinematográfica (FIPRESCI).
Otra de las cintas que vale la pena seguir es Ping pong,
debut del director Matthias Luthardt y ganadora en el Festival de
Cannes de los reconocimientos al mejor guión de la Federación de
Guionistas y Directores Franceses, el del jurado formado por alumnos
y estudiantes, así como la nominación al galardón para los nuevos
talentos del cine alemán. En 89 minutos Luthardt desciende al
subsuelo de las pasiones humanas para hilvanar una historia que
desnuda la vida interior de una pareja cuya supuesta armonía se ve
interrumpida por la visita sorpresiva de un sobrino de 16 años.
Los cinéfilos también podrán internarse en las emociones y
conflictos sociales que se desprenden de la trama de otros filmes
que han alcanzado repercusión en diversos festivales y circuitos
internacionales. Algunos de los cuales toman el relevo de la estela
de éxito que han dejado en la arena mundial cintas germanas como
Sophie Scholl, Los edukadores —que pone sobre la mesa el
debate sobre las utopías del 68 y su necesaria reformulación en la
Europa de este siglo—, La caída, Contra la pared y
Goodbye Lenin, vistas en los cines cubanos durante los últimos
tiempos.
Decisiones de Ultratumba (Wer früher stirbt, ist länger
tot), en la que se mezclan elementos fantásticos con rock and
roll y costumbrismo bávaro; El espía durmiente (Schläfer);
Añoranza (Sehnsucht) Verano en Berlín (Sommer vorm Balkon),
Vacaciones (Ferien) son otras de las películas que desfilarán
por la pantalla de la sala Charles Chaplin en esta muestra
—organizada por el Instituto Cubano de Arte e Industria
Cinematográficos, la Embajada de Alemania en Cuba y el Instituto
Goethe—, hasta el próximo lunes y que podrán dar testimonio del
resurgimiento y consolidación de la escuela del cine alemán durante
los últimos años.