Mayor eficacia en el monitoreo de las variables meteorológicas en
la actual temporada ciclónica muestran las cuatro estaciones que con
ese fin funcionan en la provincia de Ciego de Ávila, 420 kilómetros al
este de La Habana.
Como parte del programa que se lleva a cabo en todo el país, esas
instituciones fueron dotadas con moderna tecnología, que incluye
computadoras, instrumentos de medición y plantas de radio, entre otros
equipos.
Armando Mursulí Hernández, máster en ciencias meteorológicas,
explicó que el centro de Falla, remodelado recientemente, registra de
manera automática la temperatura, presión, humedad, nubosidad,
velocidad y dirección de los vientos.
Con igual propósito se construyó un nuevo local en Júcaro, lo que
permitirá a los especialistas ofrecer predicciones del tiempo con
mayor exactitud y vaticinar con aciertos la presencia de fenómenos
naturales.
Completan la red meteorológica provincial las instalaciones en el
municipio de Venezuela y Cayo Coco, esta última con pronósticos tanto
para el territorio como para el destino turístico Jardines del Rey.
Ciego de Ávila ha sido afectada al menos por 21 huracanes desde
1799 hasta la fecha, de los cuales solamente cuatro lo han hecho en el
mes de agosto.
Los principales azotes tuvieron lugar en octubre de 1812 y agosto
de 1886, años en que hubo tres fenómenos con categoría tres de la
escala Saffir Simpson, mientras que en noviembre de 1932 lo hizo el
Santa Cruz del Sur con potencia cuatro.
Otros eventos meteorológicos de triste recordación en la provincia
fueron el Lili, en 1996, y el Michelle de 2001, este último con la
denominación cuatro por tener vientos sostenidos de 240 kilómetros por
hora y rachas de hasta 300.