BONN,
Alemania, 13 de junio.— El mundo enfrentará una tarea muy difícil,
si quiere alcanzar para finales del 2009 un acuerdo que frene el
cambio climático, dijo la ONU, al terminar un encuentro de 170
países marcado por muchas recriminaciones y pocos progresos.
Según Reuters, los países en vías de desarrollo acusaron a los
más ricos de entorpecer el establecimiento de nuevos recortes para
los gases de efecto invernadero y de no poner sobre la mesa
suficientes ideas para compartir nuevas tecnologías o para ayudar a
los más pobres a adaptarse al impacto del cambio climático.
"El camino por delante es desalentador", dijo Yvo de Boer,
director del Secretariado de Cambio Climático de la ONU, sobre un
calendario de la organización que espera acabar en un acuerdo sobre
el clima en diciembre del 2009 en Copenhague, para ampliar y
endurecer el Protocolo de Kyoto.
"El paso es lento y difícil", dijo Harald Dovland, un responsable
noruego que encabeza un grupo para el estudio de los futuros
recortes de 37 países ricos que han aceptado disminuir las emisiones
en un 5% por debajo de los niveles de 1990 para el periodo
2008-2012.
Muchos países están pendientes de cómo se resolverán las
elecciones presidenciales de Estados Unidos. El presidente George W.
Bush rechazó Kyoto, considerándolo demasiado costoso.
Los ecologistas acusaron a EE.UU., Canadá y Australia de ser los
máximos responsables de frenar las negociaciones, y en cambio
alabaron las iniciativas de países como China, Brasil, Suiza y
Noruega.