"Yo vivo aquí", dice firme y rápido el actor Vladimir Cruz con ese acento hispano que delata su frecuente paso por aquellas tierras del Viejo Continente.

Sonrío: es que se te ve poco¼

El David del filme Fresa y Chocolate, que lo lanzó a la palestra internacional, aún no parece haberse recuperado de la sacudida que produjeron en la 61 edición del Festival Internacional de Cine de Cannes El argentino y Guerrilla, las dos películas que conforman el Che del afamado director norteamericano Steven Soderbergh, estrenadas juntas en la competición oficial del certamen.

Apenas llegado del importante Festival no deja de pensar en el acontecimiento. Fue una inolvidable experiencia para él encarnar en El argentino el personaje del Comandante de la Revolución Ramiro Valdés, de lo cual habla con entusiasmo y peculiar brillo en los ojos. "Un gran suceso", comenta sobre la cinta en la que también participa Jorge Perugorría.

De 4 horas y 28 minutos de duración, "muy diferentes entre sí", según la crítica acreditada en el Festival y "cada una espejo de la otra", de acuerdo a Soderbergh. El argentino ha sido considerada "una mezcla de estilo documental y de ficción, con imágenes en blanco y negro que salen de la Revolución para mostrar la intervención del Che (el puertorriqueño Benicio del Toro) en la ONU en 1964". Guerrilla centra su trama en el periodo de lucha del Guerrillero Heroico en tierras bolivianas.

"Son dos películas realizadas con el apoyo de la Fundación Ernesto Che Guevara, presidida por Aleida March. Muy respetuosas de la biografía del Che y de Cuba. El director y el mismo actor Benicio del Toro vinieron mucho a nuestro país, llevaron 6 años investigando a través de los escritos que existen del Che y otros documentos de la lucha en la Sierra Maestra".

Me mira luego con el rostro del joven inocente y romántico que quiere dejar de ser —"uno intenta diversificarse, me han encasillado un poco en el personaje de Fresa y Chocolate, Lista de espera, incluso hasta en Un paraíso bajo las estrellas"—, para insistir en que "yo vivo aquí, lo que pasa es que me llaman mucho para ofrecerme proyectos. Ahora acabo de hacer una película con Juan Carlos Tabío que se llama El cuerno de la abundancia, se rodó entre diciembre y enero, pero aún no ha sido estrenada".

Y adelanta: "También dentro de poco voy a hacer un cortometraje. Me estreno como director. A partir de una adaptación de Una escena del Fausto, de Pushkin. Lo voy a hacer en este mes".

"Aquí hay un público maravilloso, muy ávido, que siempre ha preferido las películas cubanas por su vocación de actualidad, de reflejar la realidad nacional", afirma.

Nació el 26 de julio de 1965 (Cienfuegos) y se graduó en 1988 en la especialidad de Artes Escénicas en el Instituto Superior de Arte, fecha que marcó sus comienzos como actor profesional de teatro, televisión, y cine. En su filmografía actoral aparecen, además, La caja, ...al fin, el mar, El juego de Arcibel y El sexo lo cambia todo.

Ha hecho teatro en España (Shakespeare, Valle Inclán ¼ ), precisamente con la compañía de Pedro María Sánchez se presentó en la puesta en escena del auto sacramental La divina Filotea en el recién celebrado XX Festival La Huella de España.

"Oportunidades de privilegio", considera.