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El gobierno boliviano aseveró hoy contar con oportunidades y capacidad
para enfrentar la crisis alimentaria que afecta a todo el planeta.
Según la ministra de Planificación del Desarrollo, Graciela Toro,
el 46 por ciento de la población del país andino radica en zonas
rurales y cuenta con mecanismos de producción de alimentos.
Esa parte considerable de nuestra ciudadanía, explicó, produce lo
que consume, sobre la base de una estrategia de sobrevivencia y
seguridad alimentaria, agregó.
También señaló nuevas políticas dirigidas a utilizar adecuadamente
los recursos naturales y crear mecanismos para reforzar la actividad
productiva.
El ejecutivo acordó además normas que le permiten enfrentar las
consecuencias del azote de al menos tres fenómenos climáticos desde
2006, señaló.
Toro recordó que el pasado domingo, el presidente Evo Morales
decretó el desembolso de 80 millones de dólares adicionales para la
Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (EMAPA).
Esos recursos, dijo, fortalecerán la inversión en la producción
agropecuaria de alimentos que están subiendo de precios a nivel
mundial, como el maíz, el trigo y el arroz.
Los fondos son adicionales a los 100 millones de dólares dispuestos
por el Banco de Desarrollo Productivo (BDP), de los 600 millones de
dólares previsto para crédito directo a los pequeños productores en el
territorio nacional, precisó.