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— Un nuevo sistema de vigilancia satelital impulsado por la Casa
Blanca preocupa a los legisladores demócratas, quienes temen una
injerencia en la vida de los estadounidenses, revelaron hoy medios de
prensa.
Según la cadena comunitaria de radio y televisión Democracy Now, la
bancada opositora amenazó con cancelar el programa a menos que el
Departamento de Seguridad Nacional trate en mayor profundidad el tema
de la privacidad.
El jefe de esa secretaría, Michael Chertoff, anunció días atrás que
el sistema pronto comenzará a funcionar.
La iniciativa permitirá a los funcionarios federales, estatales y
municipales un amplio acceso a imágenes de un satélite espía que
servirá de ayuda para las respuestas de emergencia y otras necesidades
de seguridad, de acuerdo con sus defensores.
Pero, los detractores denuncian que la administración del
presidente George W. Bush evitó crear protecciones legales para
asegurar que el programa no sea utilizado para espionaje a nivel
nacional.
Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 la Casa Blanca
aprobó varias leyes sobre espionaje con el argumento de defender al
país.
Como parte de esas iniciativas, Bush aboga por un proyecto de ley
que autoriza al Ejecutivo a escuchar llamadas telefónicas sin orden
judicial.
El mandatario intenta ampliar y convertir en permanente la
iniciativa conocida como "ley para proteger a Estados Unidos", que
expiró el 16 de febrero último.
La nueva propuesta de la Casa Blanca ya fue aprobada por el Senado,
e incluye otorgar inmunidad para las empresas de telecomunicaciones
que interceptan las llamadas telefónicas y correos electrónicos de los
norteamericanos por mandato oficial.
Sin embargo, la iniciativa del Ejecutivo no encuentra eco entre
muchos demócratas en la Cámara de Representantes, quienes acusan a la
administración republicana de usar el miedo a actos terroristas para
violar los derechos constitucionales.