En la noche del 22 de marzo falleció en Italia el destacado
revolucionario Gino Doné Paró el cual había nacido el 18 de mayo de
1924, cerca de Venecia. Al morir tenía 83 años.
Al terminar la escuela secundaria se incorporó al ejército
italiano, participando en la II Guerra Mundial. En 1943 se convirtió
en partisano (guerrillero) contra el fascismo alemán.
Estuvo dos veces preso en campos de concentración nazis, logrando
escapar una vez. En la segunda fue liberado por el ejército soviético
en territorio alemán.
En 1949 llegó a Cuba por primera vez por el puerto de Manzanillo,
decidiendo permanecer en la Isla. En 1951 se radicó en La Habana,
donde laboró como carpintero y desempeñó otros oficios.
Trabajó en la carretera Cienfuegos-Trinidad donde conoció a la
joven revolucionaria cubana Norma Turiño con la que contrajo nupcias
en 1954. A través de ella se vinculó al Movimiento 26 de Julio.
Entre 1955 y 1956 participó en diferentes acciones y actividades
del 26 de Julio en esa región. Cumpliendo indicaciones de Faustino
Pérez se trasladó a México a mediados de 1956.
De inmediato Gino se convirtió en uno de los futuros
expedicionarios del Granma y realizó, cumpliendo órdenes de Fidel,
misiones de traslado de correspondencia y propaganda entre Cuba y
México.
En el yate Granma fungió como Teniente Jefe de una de las escuadras
del pelotón dirigido por Raúl. Después de Alegría de Pío, rompió el
cerco de la tiranía, regresando a Santa Clara e incorporándose a la
lucha clandestina.
En 1957 salió exiliado hacia el exterior, manteniendo una posición
de defensa de la Revolución en todos los lugares donde estuvo.
Se caracterizó por una gran modestia, sencillez y discreción. Hasta
los últimos momentos de su vida, mantuvo una total fidelidad a la
Revolución Cubana y a Fidel.
Las honras fúnebres se efectuarán hoy jueves, a las 3 p.m., en la
ciudad de Mestre, Italia.
Su cadáver será cremado.