Cuba ha extendido los servicios de rehabilitación neurológica a la
Atención Primaria de Salud en los policlínicos, los cuales poseen
tecnología de punta y personal calificado para ese fin, como parte de
los Programas de la Revolución.
Esas áreas suman cerca de 500 en la Isla y ofrecen tratamiento a
pacientes con Hemiplejías (conocidas comúnmente como trombosis, o
infarto cerebral), precisó a la AIN, el doctor Julio Zamarreño,
presidente del comité organizador del Encuentro Internacional de
Neurorrehabilitación, y el Taller Internacional de Rehabilitación
Ecuestre, NeuroRehabana 2008, que sesiona esta semana en el Palacio de
Convenciones de La Habana.
En esas instituciones de la comunidad además se prestan servicios a
niños, quienes por distintas afecciones, fundamentalmente de origen
perinatal, (trastornos antes, durante o después del parto) son
tratados con notables resultados, acotó Zamarreño.
Entre los temas de debates figuran los medios de diagnósticos y el
tratamiento de las afecciones neurológicas más frecuentes en adultos y
niños, como el Parkinson y la Esclerosis Múltiple, las lesiones
cerebrales y medulares, el retraso global del neurodesarrollo, los
síndromes genéticos y trastornos metabólicos.
Paralelo a NeuroRehabana tiene lugar el Taller Internacional de
Rehabilitación Ecuestre, en el cual los especialistas disertan sobre
las ventajas de este método para combatir la discapacidad, mediante el
uso del caballo en áreas especializadas de las provincias.
Asimismo contempla el empleo de la equinoterapia en la parálisis
cerebral, la experiencia en niños sordo-ciegos, en personas de la
tercera edad, en la reeducación de niños con trastornos de la
conducta, el retraso mental, en personas con daño medular, y
accidentes cerebrovasculares que se quedan con limitaciones físicas.
Zamareño destacó que Cuba ha elevado la atención a los pequeños con
parálisis cerebral que tienen origen perinatal y existen programas
para prevenir estas afecciones.
A la cita, que culmina mañana, asisten personalidades de Europa,
entre ellos directivos del Centro de Daños del Cerebro de Madrid,
especialistas del Instituto de Barcelona, de México, Chile, Uruguay y
Argentina.