El municipio especial Isla de la Juventud inicia hoy las fiestas
populares que recuerdan la celebración de la soberanía cubana de la
entonces Isla de Pinos, disputada con EE.UU. a inicios del pasado
siglo.
El Senado yanqui postergó por más de dos décadas la firma del
Tratado Hay-Quesada, que reconocía la pertenencia de la actual Isla de
la Juventud al archipiélago de Cuba desde 1511, según lo sostuvo el
diplomático cubano Gonzalo de Quesada durante una querella con un
politiquero estadounidense.
A pesar de que la primera Constitución de la República de Cuba fue
bastante avanzada para su época, contenía la llamada Enmienda Platt
(derogada en 1934), que limitaba la soberanía del país, además de que
no mencionaba a la Isla de Pinos como parte del territorio nacional.
Al reclamar EE.UU. como propia esta ínsula, en 1903 Gonzalo de
Quesada, embajador cubano en Washington, logró convencer al gobierno
estadounidense de que el disputado territorio era parte de Cuba; sin
embargo el Tratado fue ratificado por el senado 22 años después.
Cuando el presidente de facto Alfredo Zayas agradeció el gesto
norteamericano, el Comité Antimperialista de la Universidad de La
Habana, dirigido por Julio Antonio Mella, señaló:" darnos Isla de
Pinos es un acto natural, siempre fue nuestra.
A 83 años de aquel suceso los moradores de esta Isla vuelven a las
calles a celebrar del 13 al 16 del corriente sus fiestas populares
cuya música popular bailable moverá a comparsas y carrozas luego de un
año de intenso quehacer.