Los
50 años del II Frente Oriental Frank País se celebraron hoy, con la
presencia de su fundador y jefe, el General de Ejército Raúl Castro,
presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba.
Un acto político-cultural y una revista militar se realizaron en el
mausoleo que guarda los restos de los caídos en ese bastión
guerrillero de la Sierra Cristal, ocasión para la evocación histórica,
homenaje a los caídos y compromiso de luchas ante la actualidad y el
futuro de la Revolución.
José Ramón Machado Ventura, miembro del Buró Político y Primer
Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, pronunció las
palabras centrales de la conmemoración, donde se encontraban también
los Comandantes de la Revolución Juan Almeida, Ramiro Valdés y
Guillermo García, entre otros altos dirigentes del país.
Ofrendas
florales a nombre de Fidel Castro, de Raúl y el pueblo cubano se
depositaron ante el recinto de la Llama Eterna que recuerda a los 248
integrantes de ese frente que allí reposan, mientras el toque solemne
de corneta era seguido por 21 salvas de artillería.
Miles de montañeses llenaron la explanada ante el mausoleo ubicado
en un valle entre montañas, desplegados junto a los integrantes de 10
bloques de diferentes fuerzas militares que protagonizaron la parada
militar.
Machado Ventura, uno de los 78 fundadores de este frente, en el que
llegó a ser jefe de su Departamento de Sanidad con los grados de
Comandante, en sus palabras iniciales recordó que esta celebración se
realiza pese a los 50 años de agresión enemiga en todos los terrenos.
Un
enemigo sumamente poderoso y carente de moral, que ha hecho todo
cuanto ha estado a su alcance en su afán de derrotarnos, significó.
Destacó la férrea voluntad y capacidad de resistencia como
garantías de cada victoria, en la que han sido decisivos el hecho de
que los revolucionarios cubanos no se han permitido un momento de
tregua, y el apoyo decidido del pueblo unido.
Machado Ventura se refirió al papel histórico de ese frente
guerrillero, que a la par de sus batallas militares a lo largo de los
más de 12 mil kilómetros cuadrados que llegó a abarcar, también fue
una de las primeras experiencias de organización popular
revolucionaria.
Servicios de salud, educación y atención jurídica, 274 kilómetros
de caminos arreglados, y 88 de líneas telefónicas con 13 plantas de
radio, entre otras, se cuentan entre las acciones y obras de los nueve
meses en que estuvo vigente ese bastión.
Al
destacar el papel de Raúl como jefe del frente, el orador afirmó que
era ya a los 27 años, como es hoy, "un firme convencido de que la
Revolución se dirige, en primer lugar, con el ejemplo, y de que la
inercia y la inactividad son los peores enemigos de la Revolución
verdadera"
El dirigente destacó la rica etapa de creación que sobrevendría en
estas montañas, y precisó éxitos como la mortalidad infantil hoy de
5,1 por mil nacidos vivos y la expectativa de vida por encima de los
76 años.
Centenares de escuelas, desde el círculo infantil hasta
universidades, beneficios de salud que van desde hospitales hasta
salas de rehabilitación, instalaciones deportivas, modernos sistemas
en la producción agropecuaria y forestal, entre otros, se cuentan de
1959 al presente.
Tan gigantesca obra de amor y justicia constituye el más
trascendental, perdurable y grandioso monumento que el pueblo erige a
sus héroes, manifestó Machado Ventura, citando palabras de Raúl.
No obstante, consideró que el momento hoy no es de sentarse a pedir
y que otros hagan, sino de "pegar el hombro junto a quienes aportan
cotidianamente sudor e inteligencia, en el esfuerzo por perfeccionar
lo que hemos hecho, de cambiar todo lo que necesita ser cambiado".
Dijo
que ello es imprescindible en aras de fortalecer cada vez más el
socialismo, y llamó a crecer más en la producción y prestar mejores
servicios, a incrementar las exportaciones y reducir las
importaciones, a la búsqueda incesante de la eficiencia y elevar el
orden y la disciplina laboral.
Este es el único camino real para continuar elevando paulatinamente
el nivel de vida de la población, sentenció, antes de concluir
señalando que estos momentos gloriosos lo reclaman, para no cejar en
el empeño de preservar la Patria libre, independiente y digna
conquistada.
En la ceremonia también intervino Yeleisi Suárez, profesora de una
escuela secundaria básica del territorio, quien al evocar la obra de
la Revolución precisó que los cambios que aplica el pueblo cubano son
para perfeccionar la Revolución y mejorar el socialismo.
A los enemigos le decimos, no se ilusionen, advirtió, seguimos
transitando por el camino del socialismo, con sus conductores
intachables al frente: Fidel y Raúl, afirmó.
Bloques
formados por cadetes, tanquistas, estudiantes de escuelas militares,
tropas especiales, combatientes del MININT, guardiamarinas, efectivos
del Ejército Juvenil del Trabajo y las Milicias de Tropas
Territoriales participaron en la revista militar.
El oficial revistador fue el General de Cuerpo de Ejército Álvaro
López Miera, viceministro de las FAR y jefe del Estado Mayor Central,
uno de los fundadores del Segundo Frente.
Presentes estuvieron además Abelardo Colomé Ibarra, Antonio Enrique
Lussón, Efigenio Ameijeiras, entre otros altos jefes militares de las
FAR y el MININT, quienes estuvieron entre los fundadores del frente.