— Los españoles rinden hoy homenaje a las víctimas de los atentados
realizados hace cuatro años contra varios trenes de pasajeros en
Madrid y sus alrededores con saldo de 191 muertos y más de mil 500
heridos.
En el acto de tributo a las víctimas participan los reyes Juan
Carlos y Sofía, el presidente del gobierno, José Luís Rodríguez
Zapatero, y numerosas autoridades políticas y de la sociedad española.
El 11 de marzo de 2004 a las 07:37 hora local y tres días antes de
las elecciones generales una bomba colocada en un convoy estalló en la
céntrica estación de Atocha.
Casi inmediatamente después otros dos artefactos explotaron en el
mismo tren, mientras que tragedias similares ocurrieron en convoyes en
las estaciones de El Pozo y Santa Eugenia, cercanas a la capital, y de
nuevo en la entrada de Atocha.
Fueron 10 explosiones contra el sistema de transporte más
concurrido —el llamado tren de cercanías— en uno de los horarios de
más movimiento de personas y en la ruta del denominado corredor de
Henares.
Se trató del atentado terrorista más grande de la historia española
realizado por elementos vinculados a Al Qaeda.
No obstante, el entonces presidente José María Aznar manipuló los
acontecimientos y trató de responsabilizar por los ataques a la
organización armada vasca ETA, engaño que tres días después pagó en
las urnas con la derrota de su Partido Popular.