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El ministerio ruso de Defensa expresó hoy preocupación por los planes
estadounidenses de destruir un satélite espía que dejó de funcionar
por medio de un proyectil antimisil.
La cartera a cargo del sistema defensivo ruso considera que bajo un
pretexto aceptable Washington quiere ensayar su sistema militar anti
satélite, y para eso enarbola el argumento del ingenio inutilizado que
amenaza a la Tierra.
El gobierno de Estados Unidos, por su parte, declaró que la
operación programada para el primero de marzo no constituye un ensayo
militar, comenta la Voz de Rusia.
Pero el director del Centro Henry Stimson, en la capital
norteamericana, advirtió que el Pentágono decidió emplear el satélite
averiado para perfeccionar sus proyectos de guerra en la ingravidez,
añade la emisora.
Una nota del ministerio de Defensa de Rusia advierte que Washington
no ofrece la información necesaria sobre este ejercicio militar.
La Doctrina Espacial firmada recientemente por el presidente,
George W. Bush, orienta la intensificación del diseño de armas capaces
de destruir cualquier tipo de nave fuera de la atmósfera terrestre.
Este proyecto se conjuga con la idea de desplegar 10 misiles
interceptores en Polonia y un potente radar anticoheteril en la
República Checa.
Coincidentemente, Estados Unidos rechazó hace una semana un
proyecto de Tratado sobre desmilitarización del espacio extra
terrestre, presentado por China y Rusia en la Conferencia
Internacional de Desarme, celebrada en Ginebra.
Una posición similar adoptaron los representantes norteamericanos
en la Asamblea General del ONU en 2007, donde una propuesta similar
recibió el voto de 170 países, y el único rechazo de Washington.