La noticia la trajo EFE: Si alguna vez George W. Bush y su segundo al
mando, Richard Cheney decidieran visitar la ciudad de Brattleboro, en
el estado norteamericano de Vermont, se llevarían una gran sorpresa.
Los residentes en esa localidad votarán en asamblea general si Bush
y Cheney deberían ser detenidos y acusados por crímenes de guerra,
perjurio u obstrucción a la justicia si pusieran sus pies por aquellos
lares.
El pasado viernes, el Consejo local que decide sobre los puntos del
día a tratar en la Asamblea, aprobó colocar el controvertido tema en
la agenda de marzo, informó el diario Rutland Herald.
Según lo publicado, Vermont es el único Estado de la Unión que el
inquilino de la Casa Blanca no ha visitado desde que asumió el cargo
de presidente en el 2001. ¡Y ya casi está terminando su segundo
periodo presidencial!
Para los ciudadanos de Brattleboro, el crimen más grave que han
cometido el presidente y su vice, es el de perjurio, cuando mintieron
al Congreso y a los estadounidenses sobre las pruebas para invadir a
Iraq; además, son culpables de espionaje a sus compatriotas, y de
obstrucción a la justicia por el despido, políticamente motivado, de
fiscales.
La medida ha tenido tal repercusión que también activistas de
Louisville (Kentucky) preparan otra petición similar, al igual que
grupos en Montague (Massachussetts). (SE)