El funcionario dijo que Tel Aviv recurrió a castigos colectivos, sin distinguir entre militares y civiles, lo cual es una violación del Derecho Internacional Humanitario.

Los responsables de estas acciones se consideran culpables de crímenes de guerra y deben ser perseguidos y sancionados, sostuvo Dugard, quien advirtió en declaraciones a medios de prensa que estas operaciones han dejado al menos 40 palestinos muertos.

El representante de ONU condenó el disparo de misiles contra un edificio gubernamental donde se celebraba una boda y advirtió que el ejército israelí no puede ignorar el riesgo de muertes entre civiles, legislado en la IV Convención de Ginebra.

Estados Unidos y el resto de los países comprometidos en el proceso de paz de Annapolis, tienen obligación jurídica y moral de forzar a Israel a detener los ataques contra los territorios ocupados, agregó el funcionario.

En tanto, el movimiento islámico Hamas pidió al gobierno egipcio la apertura urgente del paso de Rafah para permitir el acceso de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y el tránsito de heridos y enfermos.