La Unión Nacional de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción de
Cuba celebrará el próximo viernes 11 el tradicional acto por el Día
del Ingeniero, en el Parque de Albear, sito en Monserrate y Obispo,
Habana Vieja.
Después, en el Museo Nacional de Historia de las Ciencias Carlos J.
Finlay, de la Academia de Ciencias de Cuba, se informará sobre la
importancia histórica de la Real Academia de Ciencias de La Habana, se
cancelarán sellos de las Siete maravillas de la ingeniería cubana, y
se presentará el libro Francisco de Albear: un genio cubano universal,
de Rolando García Blanco.
Ese texto aborda la vida y obra de esa personalidad de reconocido
prestigio internacional, que fue vicepresidente de la Real Academia de
Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana, e integró diversas
instituciones académicas de otros países.
De especial sensibilidad humana, Albear contribuyó a la realización
de unas 200 obras de beneficio social en la Isla que lo vio nacer, así
como incursionó igualmente en la poesía.
A la construcción del acueducto, que ostenta su nombre, dedicó los
últimos 30 años de su fructífera existencia, hasta su muerte ocurrida
en 1887.
Esta obra ingeniera, que continúa funcionando actualmente en La
Habana, fue la más importante de la Cuba colonial y la Exposición
Universal de París, en 1878, la consideró como una de las más
relevantes del siglo XIX a nivel mundial