Un mejoramiento en la calidad de vida experimentaron este año los
más de 25 mil 700 habitantes de la provincia de Ciego de Ávila que se
incluyen en el plan Turquino-Bamburanao.
Entre los avances más sobresalientes de este programa, que abarca
en el territorio a 52 asentamientos poblacionales ubicados en el
municipio de Florencia y parte de Chambas, están la electrificación de
unas 73 viviendas en la comunidad El Serrucho y la entrega a esas
familias de los módulos de cocción.
Otros logros del plan intramontano en la provincia son la creación
de caminos, el fomento de dos patios mulares, huertos de granjas
urbanas y fincas forestales que han generado nuevos empleos.
Antonio Díaz Jiménez, secretario ejecutivo de la comisión
territorial del plan Turquino-Bamburanao, explicó que se abrieron en
el actual curso escolar dos secundarias básicas, acción que acercó esa
enseñanza a más de 200 alumnos que debían viajar más de 10 kilómetros
diariamente.
De igual forma el sistema de Salud se fortaleció con dos nuevos
hogares maternos, uno en Tamarindo y otro en Marroquín, centros que
junto a la atención garantizada del médico y enfermera de la familia
mantienen en cero la mortalidad infantil, preescolar, puérpera y por
cáncer cérvico uterino en esa zona rural.
Turquino-Bamburanao eleva el nivel de vida de unas 45 mil personas
que habitan en Caibarién, Remedios, Yaguajay, Florencia y Chambas,
ubicados en la parte Norte de Villa Clara, en Sancti Spíritus y Ciego
de Ávila.
En Cuba suman 10 las provincias montañosas que ponen en marcha el
programa de desarrollo integral para lograr la recuperación de esos
ecosistemas frágiles