CAMAGÜEY.— Aunque no imposible, es difícil que en el año 2008 se repita aquí la situación del 2007, cuando llegaron a aliviar simultáneamente en la provincia 32 embalses.

Con una máquina perforadora, los especialistas hacen calas para estudiar muestras de la arcilla y mejorar la caracterización del talud.

No obstante —explicó Gustavo Riesco López, director de obras de la Empresa de Aprovechamiento Hidráu-lico de Camagüey— lo más importante es prevenir, y eso se garantiza con la reparación y mantenimiento de nuestra red de instalaciones.

Sobre el tema Juan Hernández Zayas, especialista de la Empresa de Proyectos e Investigaciones Hidráu-licas, señaló que la más afectada, tras un deslizamiento de 600 metros en su talud, es la presa San Pedro. Después de largas sequías que agrietaron la arcilla; las continuas y fuertes lluvias la saturaron, hicieron inestable el talud y la capa vegetal, algo arcillosa, se agrietó.

Aunque los proyectos de ejecución están terminados y a la espera de la pronta entrada de los constructores, se continúan las pesquisas para perfeccionar los estudios sobre el estado actual de la presa (su capacidad es de 27 millones de metros cúbicos) y poderla someter a una explotación segura que favorezca el programa arrocero de la zona.

PRESAS AMPLIAS COMO POTREROS

El delegado adjunto del INRH en Camagüey, Irving de la Victoria Gómez, aclaró que la provincia no sólo es la que más objetos hidráulicos debe reparar ahora, con 18, sino que las 53 presas, 176 micropresas, 14 derivadoras, 13 canales magistrales y 212 kilómetros de construcciones contra inundaciones hacen del agramontino, el territorio del país con mayor número de obras de este tipo.

Segunda provincia en capacidad de almacenamiento de agua, Camagüey inició el camino en el sector en 1964, cuando el Comandante en Jefe Fidel Castro, poco después del paso del Ciclón Flora, llamó al rescate de la Voluntad Hidráulica.

Con la "herencia" de solo tres presas en 1959 —la Pontezuela, la San Felipe y la Palmarito,— capacidades que no rebasaban en total los 15 millones de metros cúbicos, tras el triunfo de enero, Camagüey se enfrascó en un amplio programa de obras hidráulicas que terminó en los años 90.

A partir de entonces, con la llegada del período especial, se acumuló un déficit de mantenimiento que duró varios años. Este fue eliminado gradualmente mediante el Movimiento de Obras Excelentes y la aplicación de sistemas de pago vinculados al rendimiento y al cumplimiento de indicadores técnicos y de operación.

De las 18 obras en plan de reparación fueron terminados dos canales arroceros en el municipio de Florida, y destacan por su envergadura los trabajos a ejecutar por el MICONS en la presa San Pedro, en el hidrorregulador Durán—que sufrió la rotura del dique— y en la presa Najasa II, también averiada en el talud; todo debe concluir antes de junio del 2008.