¿Se ha percatado usted, amigo lector, de que cada
vez usamos menos el tiempo verbal llamado futuro? Pues sí, en la
práctica del habla común lo sustituimos por una frase o locución
verbal formada por verbo auxiliar más infinitivo. Así decimos, voy a
caminar en vez de caminaré. Fíjese y seguramente podrá comprobarlo.
Si a ello unimos que el futuro de subjuntivo, ya
hace mucho tiempo que no se emplea en la conversación, aunque sí en
documentos y terminología legal (¼ si
hubiere cometido ese delito¼ ),
comprobamos que desaparece el futuro de las conjugaciones. Al menos,
los muchachos van a agradecerlo (un tiempo menos a aprender) y el
idioma, en realidad, no perderá por ello ni un poquito.