Un atacante suicida detonó hoy su carga
explosiva en la vivienda del ministro de Asuntos Políticos de
Paquistán, Amir Muqam, en la ciudad noroccidental de Peshawar, con
saldo de cuatro muertos, informaron fuentes oficiales capitalinas.
De acuerdo con portavoces de la policía, en ese atentado con
bomba resultaron heridas otras cinco personas, aunque Muqam resultó
ileso. El funcionario es también líder del Partido gubernamental
Liga Musulmana de Paquistán en la provincia Frontera Noroccidental.
Mientras, la tensión sigue elevada en Islamabad y Rawalpindi
después del fuerte despliegue de efectivos de seguridad para evitar
la prevista marcha convocada por la presidenta del Partido del
Pueblo de Paquistán, Benazir Bhutto, retenida fuera de su
residencia.
La ex primera ministra comunicó a la prensa que "estoy en frente
de mi casa en mi coche. No he sido detenida y no me han entregado
ninguna orden de detención. Hay un gran número de policías".
Bhutto precisó que el gobierno está diciendo que no puedo salir
de la casa porque algunos terroristas suicidas han llegado a
Islamabad. Pero si saben que estos terroristas están en Islamabad,
¿por qué no han sido arrestados?", se preguntó.
Los seguidores de Bhutto tienen previsto celebrar la
manifestación en Rawalpindi, ciudad situada a unos 30 kilómetros al
sur de esta capital, para protestar contra la implantación del
estado de excepción.
Fuentes gubernamentales señalaron a medios informativos que el
acordonamiento de la zona donde reside la ex primera ministra
paquistaní fue ordenado para protegerla de un posible atentado
dinamitero.
En Rawalpindi, el gobierno acordonó la zona elegida para la
marcha y desplegó seis mil militares para impedirla, prohibida por
la vigencia de la ley de emergencia.
El jefe de la policía de Rawalpindi, Saud Aziz, subrayó a la
agencia de prensa APP que la manifestación no se celebrará "bajo
ninguna circunstancia" y "la ley actúa contra cualquiera que la
desafíe".