El vicepresidente cubano Carlos Lage llamó a trabajar intensamente para resarcir los daños provocados por la tormenta tropical Noel, a la vez que elogió el Sistema de Defensa Civil del país que impidió la pérdida de vidas humanas a causa del fenómeno atmosférico.

Nos queda mucho trabajo por delante afirmó el secretario del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, luego de un recorrido por zonas de la provincia de Santiago de Cuba y una reunión que sostuvo con los integrantes del Consejo de Defensa Provincial.

Los daños son cuantiosos, pero vemos el espíritu de los santiagueros y la labor que acometen para reparar cuanto antes las averías y afectaciones y tenemos confianza en que habrá una recuperación efectiva, precisó.

El también miembro del Buró Político dijo que por la organización y disciplina en las tareas de preservación de la población y la economía no hubo que lamentar muertes ni daños a las personas.

Los daños mayores son en viales y en las viviendas, más de 20 mil de estas con afectaciones, y de las cuales más de mil fueron destruidas totalmente, tanto por el paso de "Noel" como del régimen de lluvias de más de dos semanas que afectó a la zona oriental a fines de septiembre y principios de octubre.

Acompañado por Misael Enamorado, integrante del Buró Político y primer secretario del Partido en la provincia, Lage estuvo en las localidades de Uvero, municipio de Guamá, Cruce de Los Baños, cabecera de Tercer Frente, y en predios de la Empresa Laguna Blanca, en Contramaestre, la principal abastecedora de productos agropecuarios de la capital provincial.

Allí pudo apreciar los daños provocados por las lluvias, se entrevistó con la población y funcionarios y apreció las labores de recuperación.

Según la información brindada la mitad del patronato vial del territorio fue dañada, donde se cuentan más de cuatro mil kilómetros de carreteras y caminos, 142 obras de fábrica y 24 puentes automotores y 12 ferroviarios.

Labores de la Agricultura y la venidera zafra están detenidas, existen decenas de comunidades aisladas, como la de Dos Palmas e inundaciones que impiden la realización de las tareas cotidianas de la economía y la sociedad.

Casi cuatro mil casas tuvieron algún tipo de afectación, la mayoría en los techos, al igual que 54 unidades comerciales.

Se informó también de la asignación al territorio de 40 mil tejas de fibrocemento, 20 mil de zinc, 25 mil de fibroasfalto y dos mil rollos de papel de techo, recursos que en la medida en que llegan a la provincia se entregan a la población.

Sobresalen los daños en la infraestructura de acueductos, lo que unas 350 mil personas se han perjudicado debido al rompimiento de las tuberías principales y secundarias, motobombas y otras obras, incluida la llamada conductora maestra de la ciudad santiaguera, una vez más movida por las aguas en varios kilómetros.

Los sectores azucarero y agrícola fueron duramente golpeados, en especial, la cosecha cafetalera que ha sufrido el goteo de unas 89 mil latas del grano.

A ello se suman las 104 mil perdidas en la anterior etapa de precipitaciones, lo cual pone en peligro el estimado de plan de 1,5 millón de latas, las cuales se preveían para esta campaña.

Tan intensas fueron las lluvias que el promedio de octubre superó el 350 por ciento de su línea histórica y los 11 embalses del territorio vierten al mismo tiempo, algo que por primera vez también ocurre.