Como médicos dedicados a la docencia, profesionales de la salud y
especialistas que han viajado toda Cuba durante muchos años,
periodistas radicados en Cuba que informan sobre la asistencia médica
cubana y los pacientes que han recibido atención medica en ese país, y
cuyo interés en Cuba no es político sino profesional, objetamos
enérgicamente la información contenida en el reportaje de John Stossel
para 20/20 "Sick in America, Healthy in Cuba?" (¿Enfermos en Estados
Unidos, sanos en Cuba?) – 7de septiembre de 2007.
El reportaje es ostensiblemente parcial, erróneo y engañoso. Tanto
el periodismo como la profesión médica se basan en las pruebas, de
manera que nos sentimos horrorizados al ver que 20/20 reportaba como
verdaderos, hechos que simplemente no lo son.
Nos molesta el hecho de que el reportaje de Stossel parece comenzar
con un sesgo político - Cuba es un país comunista pobre, de modo que
no puede tener un sistema de asistencia medica exitoso – que ignora
hechos que se apartan de la premisa.
Estamos obligados a aclarar las cosas.
No pretendemos promocionar el sistema de asistencia médica cubano
como un "modelo" a seguir por los Estados Unidos, sin embargo, habla
mucho en su favor el hecho de que esta pequeña nación de pocos
recursos, brinde asistencia médica a todos sus ciudadanos, sin costo
alguno. Colin Powell así lo reconoció en su audiencia de confirmación
como Secretario de Estado en 2001. La noticia de 20/20 menosprecia la
enseñanza fundamental de la experiencia de la asistencia médica
cubana: hasta la sociedad o comunidad más pobre puede garantizar el
acceso de su pueblo a la asistencia médica y mejorar sus vidas al dar
a la salud máxima prioridad. Es una enseñanza y un reto para nuestro
propio país.
En cuanto al reportaje en si: Lo más asombroso es la total ausencia
de equilibrio. El señor Stossel no buscó comentarios de trabajadores
profesionales de la salud en Cuba; en cambio, cita como hechos, las
opiniones de un sector de exiliados cubanos en Miami. La única
organización que cita para refutar las acusaciones del director del
documental "Sicko", Michael Moore, es la Agencia Central de
Inteligencia (CIA) (que difería con las estadísticas del gobierno
cubano sobre la esperanza de vida por menos de un año).
Por último, las fotografías que se muestran provienen de un blog
impúdicamente parcial y dudoso que dirigen exiliados cubanos.
Lo más importante de todo es que los presuntos hechos que presenta
Stossel son totalmente inciertos.
? Las estadísticas de Cuba sobre la salud no son "inventadas" por
los funcionarios del gobierno para presentar una imagen falsa y
encomiosa de la salud pública. De hecho, el país admite que las
muertes maternas todavía representan un problema, al igual que el
posible aumento de la diabetes, la obesidad y de la incidencia de
varios tipos de cáncer. La información de 20/20 descarta la validez de
las estadísticas de las Naciones Unidas y de la Organización Mundial
de la Salud porque provienen de los funcionarios de la salud cubanos,
sin embargo, Stossel no menciona que ese es el modo en que las
Naciones Unidas reúne las estadísticas de todos los países. Tampoco se
molesta en señalar que otras fuentes como la Organización Panamericana
de la Salud (OPS), que mantiene oficinas permanentes en La Habana y
envía de forma periódica equipos de evaluación a Cuba, ha hecho
público informes con una visión positiva luego de realizar
evaluaciones directas a partir de los viajes de sus funcionarios por
las provincias del país.
También, muchos de nosotros hemos sido testigos de cómo se recogen
las estadísticas de la salud de Cuba, y tenemos conocimiento directo
del Departamento de Estadísticas del Ministerio de Salud Pública y la
Unidad de Análisis y Tendencias en Salud (UATS), que se asociaron con
la OPS y con Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
de los Estados Unidos durante una epidemia de neuropatía que azotó a
Cuba hace unos años.
? Los problemas económicos de Cuba durante los años noventa
trajeron como consecuencia el deterioro físico de muchos de sus
hospitales. No obstante, 52 de estos hospitales ahora son objeto de un
necesario proceso de remodelación y reparación. Aunque el señor Moore
y sus acompañantes que respondieron al llamado del 11 de septiembre
fueron a una de las instalaciones restauradas, ese hospital brinda
servicios a 156 000 personas que viven en uno de las zonas más
superpoblados de La Habana. No es un hospital reservado para grupos
selectos del gobierno o extranjeros.
? La acusación de que las mujeres cubanas son comúnmente sometidas
a abortos forzados es a todas luces falsa. Por ley, el aborto en Cuba
es gratis y de fácil acceso. Mas, durante años, los índices de aborto
han disminuido, no aumentado. A las mujeres se les informa acerca de
sus opciones si durante el embarazo se detectan malformaciones
congénitas y se les permite tomar su propia decisión, igual que sucede
en otros países. De hecho, se destinan instalaciones completas como el
Cardiocentro Infantil en La Habana y la red nacional de escuelas
especiales para niños que nacen con problemas congénitos.
Cuando se trata de asistencia médica, Cuba se las arregla para
hacer mucho con poco, y obtiene resultados, con una fracción del
costo, que pueden compararse con muchos indicadores de salud de los
Estados Unidos. Una encuesta llevada acabo por Gallup el pasado año
reveló que el 96 por ciento de los ciudadanos cubanos declaraban que
siempre tenían acceso a la asistencia médica, independientemente de
quiénes fueran o de cuáles fueran sus ingresos.
Instamos a la ABC NEWS a que corrijan las falsas declaraciones e
impresiones expuestas en el reportaje del señor Stossel.
Atentamente,
Peter G. Bourne, Doctor en Medicina, Master en Humanidades –
Presidente, Junta Directiva de MEDICC – Especialista invitado en Green
College, Universidad de Oxford.
Alfred W. Brann, hijo., Doctor en Medicina – Profesor de
Pediatría, Facultad de Medicina de la Universidad de Emory.
Harry E. Douglas III, Doctor en Administración Pública
(Jubilado) – ex vicepresidente ejecutivo y ex presidente interino,
Universidad de Medicina y Ciencias Charles Drew; Presidente del
Consejo rector, Universidad de California del Sur de Ciencias de la
Salud
Dabney Evans, Master en Salud Pública, Especialista en
Educación para la Salud –Departamento de Salud Mundial, Facultad de
Salud Pública Rollins de la Universidad de Emory.
Jean Handy, Doctor en Filosofía – Director Adjunto de
Microbiología e Inmunología, Facultad de Medicina de la Universidad de
Carolina del Norte, Chapel Hill.
C. William Keck, Doctor en Medicina, Master en Salud Pública,
Miembro de la Universidad Norteamericana de Medicina Preventiva –
Profesor y Decano Adjunto, Facultad de Medicina de las Universidades
Noroccidentales de Ohio; Antiguo presidente, Asociación Americana de
Salud Pública.
Albert S. Kuperman, Doctor en Filosofía – Decano Adjunto para
Asuntos Educacionales, Facultad de Medicina Albert Einstein de la
Universidad de Yeshiva, EE.UU.
F. Javier Nieto, Doctor en Medicina, Doctor en Filosofía –
Profesor y Presidente, Departamento de las Ciencias de la Salud de la
Población, Facultad de Medicina y Salud Pública de la Universidad de
Wisconsin.
Gail A. Reed, Master en Ciencias – Director Internacional,
MEDICC.
Patricia Rodney, Enfermera Diplomada, Master en Salud Pública,
Doctora en Filosofía – Directora del Programa de Masters en Salud
Pública y Profesora Adjunta, Programa de Master en Salud Pública de la
Facultad de Medicina Morehouse.
Ronald K. St. John, Doctor en Medicina, Master en Salud Pública
– Gerente General y Presidente, Global Health News Network Corporation.
Tomado de
Cubadebate