Actualizado 2:00 p.m. hora local

Datos preliminares ratifican victoria de
alianza oficial ecuatoriana

QUITO, 4 de octubre (PL).— Los resultados del conteo oficial de votos ratifican hoy la victoria del movimiento gubernamental Alianza País en los comicios ecuatorianos por la Asamblea Constituyente, y destapan la crisis de partidos añejos.

Al contabilizarse el 52 por ciento de las 37 mil 656 actas, Alianza País acumula el 70,75 por ciento de los votos, mientras el resto de las agrupaciones no acapara ni el 10 por ciento del sufragio.

Según los datos oficiales del Tribunal Supremo Electoral (TSE), la agrupación del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, tendrá amplia mayoría en la Constituyente, lo cual evidencia la derrota de las demás fuerzas políticas.

En su segundo puesto y muy alejado del primer lugar aparece el Partido Sociedad Patriótica (PSP), del ex mandatario Lucio Gutiérrez, con el 8,16 por ciento del sufragio.

Le siguen las organizaciones Renovadora Institucional (Prian) con un 5,57 por ciento, Socialcristiana (3,03), Red Democrática (2) y el Movimiento Popular Democrático (1,66 por ciento).

Otras agrupaciones como el partido UNO, de derecha, los roldosistas, la Izquierda Democrática y grupos sociales no sobrepasan hasta el momento el uno por ciento de votos.

El TSE inició el conteo oficial la noche del domingo pasado y de acuerdo con el ritmo de trabajo, concluirá esta labor en menos de 10 días.

Estos resultados motivaron preocupación en el seno de varias tendencias políticas, cuyas bases comenzaron a reclamar la renuncia de sus dirigentes y transformaciones radicales.

Una fracción de la Izquierda Democrática pide ahora la cabeza de su máximo representante, Andrés Páez, y una profunda renovación de esa agrupación socialdemócrata.

El director del Partido Socialcristiano, Pascual del Cioppo, reconoció su derrota y señaló que muchos partidos no entendieron que se necesitaba incorporar nuevos cuadros, entre otras cosas.

Expertos políticos consideran que estos resultados muestran un rechazo abrumador a las viejas prácticas de la partidocracia, y a los liderazgos que se preciaban de ser absolutos.

 

| Portada  | Nacionales | Internacionales | Cultura | Deportes | Cuba en el mundo |
| Comentarios | Opinión Gráfica | Ciencia y Tecnología | Consulta Médica | Cartas| Especiales |

SubirSubir