Los horizontes que abre a la intervención quirúrgica herniaria el
uso de bioprótesis y mallas se debatirán hoy en la XIX Jornada
Territorial de Cirugía, que se extenderá hasta el sábado en esta
oriental ciudad.
El foro lo auspician la Sociedad Cubana (SCC) de la citada
especialidad y el hospital provincial general docente, al cual
asistirán centenar y medio de delegados que discutirán 215 ponencias
elaboradas en todo el país, excepto Pinar del Río y Matanzas.
Surgido inicialmente con la intervención de las cinco provincias
orientales, la cita se extendió progresivamente al resto de la ínsula
y es catalogada como una de las más importantes de la rama por el
Doctor José Miguel Goderich, Presidente de la SCC.
Goderich dictará una conferencia sobre los últimos adelantos en
bioprótesis, tema sobre el cual también disertará el Doctor Eduardo
Molina, responsable de la sección de hernia y pared abdominal de la
referida sociedad médica.
La hernia se define como la salida o protusión de tejidos, parte de
estos u órganos a través de un orificio natural o adquirido, en zonas
débiles de la cavidad abdómino-pelviana o perineal, y quienes la
padecen han encontrado un paliativo en esos implantes.
El proceder quirúrgico es inapelable en pacientes con esa
enfermedad, por lo que su dilación puede complicar una operación por
lo general rutinaria, ya por el método clásico, con el cual el defecto
se repara con los tejidos del paciente, o mediante mallas.
Las hernias se producen cuando el contenido del saco herniario
queda atrapado, perjudica el transito intestinal y puede provocar una
oclusión.
Tal complicación puede evolucionar hacia el estrangulamiento de la
hernia, si se compromete la circulación del segmento de intestino
atrapado en el saco herniario.
La dilación en acudir al médico puede ocasionar también el fenómeno
denominado pérdida de domicilio, el cual difiere de los anteriores
porque compromete además la estabilidad circulatoria.
También imposibilita que retornen a la cavidad abdominal las
asasintestinales y los tejidos contenidos en el saco herniario, en el
cual salvo el páncreas, se han encontrado los más impensados órganos.