El programa nacional de
alfabetización en Bolivia se consolida hoy cuando en el municipio de
Tiquina, a 117 kilómetros al noreste de esta ciudad, flamee la bandera
blanca, símbolo de victoria en la lucha contra la ignorancia.
De acuerdo con Javier Labrada, jefe de los asesores cubanos en esa
campaña, con sus más de seis mil habitantes, en su mayoría
agricultores aimaras, esa localidad será la número 25 en declararse
territorio libre de analfabetismo.
Ubicada sobre la ribera del Lago Titicaca, el embalse navegable más
alto del mundo, Tiquina será escenario este jueves de la promoción de
más de mil 800 alfabetizados, en su mayoría mujeres, con el método
cubano "Yo sí puedo".
También señaló que cuando concluya el mes de septiembre, serán 35
los municipios que no tendrán iletrados.
La meta del país, preciso, debe cumplirse en octubre de 2008 con la
enseñanza de la lecto-escritura a un millón 200 mil adultos mayores de
15 años.
Labrada explicó que un momento decisivo de la estrategia es la
grabación de las teleclases y la impresión de cartillas en las lenguas
nativas (aimara y quechua), lo cual permite llevar el conocimiento a
los pueblos originarios.
Asimismo se han instalado miles de paneles solares en comunidades
apartadas que carecían de energía eléctrica, otro eslabón clave en el
impulso que tiene la alfabetización en Bolivia.
Con un total de doce municipios libres de analfabetismo, el
departamento de Oruro, es el más avanzado en este renglón, seguido de
La Paz, que tiene ocho.
Desde marzo de 2006, cuando comenzó el plan, en toda Bolivia se han
alfabetizado 224 mil 835 personas y están incorporadas a las aulas más
de 534 mil, lo que significa un 44,5 por ciento en relación con el
objetivo final.