Actualizado 12:30 p.m. hora local

Persiste en Iraq rutina de la violencia

BAGDAD, 6 de septiembre (PL).— Una bomba que explotó cerca de un grupo de personas en el barrio de Zafaraniya, en el sureste de Bagdad, causó un muerto y cinco heridos, según informó hoy el Ministerio de Defensa.

Los afectados se reunieron en ese lugar para tratar de contratarse en labores eventuales, acotó.

Por su parte, la policía informó los hallazgos de 11 cadáveres en las calles de esta capital en las últimas horas, la mayoría con señales de tortura e impactos de disparos hechos a quemarropa.

La fuente dijo que los occisos estaban con las manos atadas, los ojos vendados y al parecer ejecutados sumariamente por algún escuadrón de la muerte.

Mientras medios de prensa indican al factor confesional como clave, el ciudadano común tiene múltiples consideraciones sobre tales hallazgos, entre ellas la persistencia de una guerra sucia en el proceso de ocupación extranjera.

Esos medios también difundieron hoy que Ali Hassan al Majid, funcionario de alto nivel en el gobierno de Saddam Hussein, será ahorcado el próximo sábado junto con ex ministro de Defensa Sultan Hashim y el ex comandante Hussein Rajad.

El abogado de Al Majid, Badia Aref Essat, dijo a la agencia de noticias INA que le llamaron del reclusorio para avisarle sobre las ejecuciones.

Las condenas recibieron el pasado martes la ratificación de la sala de apelaciones del Tribunal Especial que juzga a los funcionarios del derribado gobierno del Partido Baas.

A Ali Hassan al Majid, primo de Saddam, se le acusó de asesinatos colectivos, torturas y otros delitos contra minorías nacionales.

 

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