Plomo dentro y fuera de la pantalla. Lo más reciente, la arremetida
de Richard Gere durante una conferencia de prensa que precedió al
filme The Hunting Party, de Richard Shepard, en el que el actor
da vida a un periodista que investiga la sangrienta participación de
la CIA en Bosnia, un drama que sigue las pistas de un trabajo de la
revista Esquire.
Dijo Richard Gere, en una clara alusión a la clase media de su
nación: "Todo el mundo busca la seguridad, pero mi país no es capaz de
entender al resto del mundo, ni la religión o la cultura foráneas. Lo
peor es que nos creemos un pueblo depositario de la voluntad divina".
Tras preguntarse cómo era posible haber reelegido al actual
presidente de los Estados Unidos, aseguró —según reportan las
agencias— que "Bush representa el lado tenebroso de nosotros, los
estadounidenses".
Días antes, Venecia había sido estremecida por dos filmes
relacionados con la intervención norteamericana en Iraq, Redacted,
de Brian de Palma (Los intocables, La dalia negra, vista
recientemente en la televisión) y En el Valle de Elah, de Paul Haggis
(Crash) y protagonizada por Tommy Lee Jones y Charlize Theron.
En Redacted (término que se utiliza para señalar que a un
documento se le censuró material delicado) se reconstruye la historia
real de un grupo de soldados que violan a una niña iraquí de 15 años,
matan a su familia y luego la asesinan a ella a disparos. Triste tema
que tuvo también una repercusión sarcástica: el mismo día de
presentarse el filme en el Festival, el presidente Bush proclamaba en
la Casa Blanca que en Iraq se asistía a un "notable progreso" en
materia de derechos de la mujer.
Luego de dar a conocer su película, De Palma no se anduvo con
rodeos: él quería detener la guerra, exponiéndole a los espectadores
las imágenes de horror que los principales medios de comunicación no
le están transmitiendo al público norteamericano.
Filme duro, mezcla de realidad y ficción, la última escena, se
asegura, es de esas que no se olvidan en largo tiempo: un montaje de
miles de civiles masacrados durante la guerra de Iraq, que incluye a
mujeres y niños mutilados.
En cuanto a En el valle de Elah, su historia se desarrolla a
partir del asesinato de un joven soldado que regresa de Iraq con una
hoja de servicio diferente a lo que en realidad ha sido. Su padre se
empeña en buscar al homicida, pero a cada paso encuentra eslabones
siniestros.
Venecia bajo la presión de la realidad contemporánea parece
anunciar el inicio de una serie de filmes acerca de la agresión a Iraq,
concebidos con un marcado interés de análisis crítico. Filón
comercial, o plausible responsabilidad artística, o una combinación de
ambos, lo cierto es que hasta una buena parte del público
norteamericano —tan alimentado con boberías ficticias— reconoce que no
son tiempos para más héroes de pacotilla luchando en una guerra
demasiado sucia.