— El presidente ruso, Vladimir Putin, orientó hoy a la jefatura del
Servicio Federal de Seguridad (SFS) que le informe permanentemente de
la investigación sobre el atentado terrorista en el ferrocarril
Moscú-San Petersburgo.
En conversación telefónica con el responsable del SFS, Nikolai
Patrushev, el jefe del Kremlin recibió un amplio reporte sobre el
avance de las operaciones, afirmó el portavoz presidencial, Alexei
Gromov.
Asimismo, el estadista orientó por la misma vía al ministro en
funciones de Sanidad y Desarrollo Social, Vladimir Starodúbov, que de
manera personal controle la ayuda a los damnificados.
Putin recorre la República autónoma de Tuvá en compañía del
príncipe Alberto II de Mónaco.
La Fiscalía y peritos de la Unión de Ferrocarriles sostienen que el
descarrilamiento del tren fue provocado por la explosión de dinamita
colocada bajo los rieles.
El vice fiscal general de Rusia, Alexandr Bastrykin, viajó al
escenario de los hechos al frente de un equipo de instructores y
criminalistas, y encabeza las pesquisas.
Doce vagones del tren rápido Nevski Express número 166 se
descarrilaron pasadas las 21:00 (hora de Moscú) en el kilómetro 179 en
la región de Novgorog, con un saldo de 60 heridos, de estos 25
hospitalizados.
Unos 800 metros de la línea férrea sufrieron daños durante el
accidente provocado por la explosión de una carga estimada en dos
kilogramos del explosivo, según el Primer Canal de la televisión.
Por la ruta Moscú-San Petersburgo se trasladan cada año más de 750
mil pasajeros y cifras millonarias de toneladas de mercancías.
En servicio desde hace seis años, el Nevski Express cubre la
distancia entre ambas ciudades en cuatro horas y 30 minutos a una
velocidad de 200 kilómetros por hora.