Los resultados de la III Cumbre de PETROCARIBE, confirmaron las palabras del Vicepresidente del Consejo de Estado cubano, Carlos Lage: "Este ha sido una evento muy productivo y un ejemplo de cómo debemos reunirnos".

Durante la cita, Haití y Nicaragua formalizaron su adhesión al convenio, y se suscribió un Tratado de Seguridad Energética, similar al establecido la semana anterior entre Venezuela, Argentina y Uruguay.

El mismo tendrá cinco líneas fundamentales que abarcarían la participación de los caribeños en la explotación de un bloque de la Faja Petrolífera del Orinoco, la instalación de refinerías, un sistema de abastecimiento de gas, el desarrollo de la petroquímica, el uso de fuentes alternativas de energía y el ahorro.

Granada, Belice, Cuba, Dominica, Haití, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas, Jamaica, Surinam y Venezuela suscribieron el tratado, sin precedentes en la región.

La Declaración Política, firmada por los 16 integrantes del mecanismo de cooperación, indica que el aspecto energético es un elemento fundamental para el avance hacia la integración económica, social y estratégica.

El documento recoge la intención de transformar el Caribe en un gran bloque, en el escenario del mundo multipolar en formación.

El presidente Hugo Chávez, afirmó que la energía, particularmente petróleo y gas, pudiera ser la columna central de la unión latinoamericana y caribeña, como fue el carbón y el acero para la Unión Europea.

En ese sentido ratificó la disposición de Venezuela de compartir su riqueza petrolera y gasífera con las naciones del área.

Acompañaron al líder bolivariano, presidentes, primeros ministros y representantes de los países miembros.

Propuestas para la consolidación de la seguridad energética y el rechazo al desarrollo de los biocombustibles que propone Estados Unidos -- y que aumentaría el precio de los alimentos-- centraron los debates de la reunión. Además se pasó revista a los proyectos adoptados en el marco de PETROCARIBE.

Carlos Lage, quien encabezó la delegación cubana al evento, ratificó la posición expuesta por el Comandante en Jefe, Fidel Castro, en la Cumbre constitutiva, donde anunció que la Isla no se acogería a sus ventajas económicas, a partir del criterio de que el mecanismo debía consolidarse primero y poner su esfuerzo en las economías más pequeñas de la región.

Lage afirmó que "ningún otro país del mundo, solo Venezuela, promueve hoy una iniciativa tan estratégica, justa y generosa", en un contexto marcado por el alza sostenida del precio de los hidrocarburos.

Sobre la labor de la Cuba, dijo que "nuestro país ha trabajado para aportar su experiencia en el ahorro de combustible", como la sustitución de bombillos incandescentes por ahorradores, extendida a 11 estados del Caribe, donde ha tenido importantes resultados.

A modo de ejemplo, mencionó que en Venezuela el cambio de luminaria ha permitido una reducción de 1 500 MW, y en las naciones caribeñas ha significado más de 40 millones de dólares en ahorro anual en combustible, y no menos de 160 millones de dólares en inversión.

El dirigente cubano hizo referencia a otras acciones emprendidas en el ámbito de PETROCARIBE, como una empresa mixta con Venezuela para el transporte de combustible, que opera al costo para los países del área y una refinería que entrará en funcionamiento a finales de año en Cienfuegos.

"Queremos ratificarle a nuestros hermanos del Caribe que cuanto éxito alcancemos estará a disposición de ustedes", aseguró.