BAGDAD,
8 de agosto.— Al menos 30 personas murieron, entre ellas mujeres y
niños, durante un ataque aéreo del Ejército estadounidense contra
Ciudad Sadr, al este de esta capital, reportó PL.
La operación de las fuerzas conjuntas iraquíes y norteamericanas
para detener a supuestos miembros de la resistencia comenzó al
amanecer y es catalogada como la más sangrienta lanzada hasta ahora
contra un barrio iraquí.
La líder chiita Asmaa al Mawsawi denunció que los helicópteros
estadounidenses bombardearon durante la madrugada casas pobres de la
ciudad. "No creo que hubiese razones de seguridad tras este
operativo", dijo.
Por otra parte, un policía iraquí murió y otros seis resultaron
heridos por la explosión de una bomba en el centro de Kirkuk, al
nordeste de Bagdad, informó la policía local.
El Pentágono solicitó al Congreso 750 millones de dólares para
incrementar el apoyo aéreo y los equipos móviles blindados de las
tropas estadounidenses destacadas en Iraq, confirmó hoy el diario
ArmyTimes.
De acuerdo con expertos del Departamento de Defensa, las fuerzas de
combate norteamericanas necesitan de ese respaldo con urgencia para
enfrentar la expandida táctica insurgente de colocar bombas a las
orillas de los caminos.