El
compañero Guillermo Cabrera Álvarez, periodista de una larga
trayectoria profesional y revolucionaria, falleció repentinamente ayer
víctima de un paro cardiaco.
Guillermo desempeñaba en la actualidad la responsabilidad de
director del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, de la
Unión de Periodistas de Cuba.
Su consagrada entrega de 45 años al periodismo, la inició de muy
joven, como reportero en la revista Mella, entonces órgano de la Unión
de Jóvenes Comunistas.
Al unificarse esa revista con el periódico La Tarde y constituirse
así Juventud Rebelde, fue fundador del diario de la juventud cubana.
En Juventud Rebelde se destacó como periodista y como jefe del
equipo de Historia, Entre sus notables reportajes se encuentran los de
la marcha Camilo-Che, de los contingentes en la agricultura y de otras
muchas tareas que acometió la juventud en aquellos años.
Al crearse la revista Somos Jóvenes, Guillermo fue director y
fundador de esta publicación. Posteriormente fue promovido al cargo de
subdirector del diario Granma, donde se desempeñó hasta ser
nombrado director del Instituto José Martí.
Junto a las tareas de dirección que ejerció en esos diferentes
órganos de prensa, siempre se mantuvo escribiendo artículos,
incluyendo las populares secciones Abrecartas, de Granma, y
Tecla ocurrente, de Juventud Rebelde.
Se destacó, asimismo en diversas actividades de la Unión de
Periodistas. Particularmente memorables fueron sus intervenciones en
diversos plenos de la organización, por las que llegó a ser calificado
como "El genio".
Publicó además libros de historia, entre ellos uno sobre el
comandante Camilo Cienfuegos, por quien siempre sintió una gran
admiración y fuera uno de sus biógrafos.
Muchos jóvenes periodistas tuvieron en él a un inolvidable maestro,
siempre dispuesto a brindar su magisterio, tanto en lo profesional,
como en cualquier otro aspecto de la vida.
Guillermo, Guille, el Genio, el profesor, el amigo deja una estela
imborrable en la historia del periodismo revolucionario cubano.