La delegación del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio
Ambiente (CITMA), en La Habana, prioriza la atención a la fábrica de
cemento y a la Termoeléctrica del Mariel, para mitigar la
contaminación que causan al entorno.
Esas y otras 163 industrias, centros porcinos y organismos figuran
en el estudio realizado por la Unidad del Medio Ambiente del CITMA en
esa provincia sobre los focos que requieren seguimiento y vigilancia
sistemáticos para reducir los niveles de afectación ambiental que
generan.
Organizan visitas e inspecciones estatales a esas entidades para
verificar in situ la situación, tomar decisiones con los organismos a
los cuales corresponde la solución de esos problemas y definir las
acciones necesarias en cada lugar, las cuales son de obligatorio
cumplimiento, según las disposiciones vigentes.
Mientras en la fábrica de cemento del Mariel instalaron
electrofiltros que disminuyen las emanaciones de polvo, para la
Termoeléctrica Máximo Gómez se edifica una central de ocho grupos
electrógenos que trabajará con fuel oil y tiene un moderno sistema de
tratamiento de los gases.
Además, desde el punto de vista económico, la Termoeléctrica
consume 100 gramos menos por kiloWatts/ hora generado y la tonelada de
fuel oil es cuatro veces más barata que la de diesel tradicionalmente
empleada, puntualizó Edel Gómez, director de la Organización Básica
Eléctrica en el territorio.
Lázaro Enrique Arias, director de la Unidad de Medio Ambiente del
CITMA, recalcó que las entidades incluidas en el estudio fueron
seleccionadas porque en sus procesos productivos generan sustancias
que contaminan la atmósfera.
Clasificaron también como prioritarias para su atención la planta
de asfalto, la de carburo y acetileno de Caimito, la empresa de
Extracción de Petróleo y la Termoeléctrica, ambas de Santa Cruz del
Norte, y otras entidades.
Con todas las unidades incluidas trabaja el CITMA para la
implantación de una estrategia ambiental que beneficie al territorio.