El Movimiento Boliviano de
Solidaridad con Cuba expresó hoy aquí su condena a la liberación en
Estados Unidos del terrorista internacional Luis Posada Carriles.
El gobierno estadounidense le ha entregado un pasaporte a la
impunidad, aseguró la miembro del Movimiento Patricia Jiménez, durante
su intervención en un acto realizado en la céntrica plaza capitalina
San Francisco, que acogió a un centenar de interesados.
Indicó que los amigos de Cuba no pueden estar de acuerdo en que un
terrorista probado y confeso contra la isla y sus intereses en el
exterior sea puesto en libertad.
Jiménez recordó que Posada Carriles es el asesino de 73 personas
que viajaban en un avión cubano en 1976, siniestrado en pleno vuelo
frente a las costas de Barbados por orden de este.
Asimismo, señaló que este individuo atento no sólo contra el pueblo
de la mayor de las Antillas, sino también contra los de toda
Latinoamérica con su participación probada en el Plan Cóndor, de los
regímenes militares del continente.
La activista contrastó la posición de Washington frente al
terrorismo, cuando expuso que mientras Posada Carriles goza de
libertad, cinco antiterroristas cubanos permanecen en prisión en el
norteño país, por abortar planes violentos contra la isla.
Por eso expresamos nuestra indignación hoy aquí y les pedimos a
ustedes que levanten sus voces para que el criminal sea juzgado y los
cinco valerosos cubanos sean liberados de una vez, afirmó.
A su vez, el miembro del Partido Socialista Boliviano Walter
Vásquez indicó que se viven tiempos de cinismo del imperio, en alusión
directa a la política de Estados Unidos.
Vásquez manifestó que el asunto preocupa no sólo porque se liberó a
un terrorista, sino porque el gobierno de Estados Unidos milita en
esta corriente, como lo demuestran sus invasiones a Afganistán e Iraq.
Es la hora de defender a Cuba, la causa de sus cinco luchadores
antiterroristas presos, y exigir justicia en el caso Posada Carriles,
porque se trata de salvarnos a nosotros mismos, aseguró el veterano
militante socialista.
Los participantes en el acto masivo también firmaron una
declaración condenatoria, que será enviada a la embajada de Estados
Unidos en esta ciudad.