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Emotiva carta de Martí a su madre
Madre mía:
[1892]
Todavía no me siento con fuerzas para escribir. No es nada, no es
ninguna enfermedad; no es ningún peligro de muerte: -la muerte no me
mata, caí unos días cuando la infamia fue muy grande; pero me levanté.
La gente me quiere, y me ha ayudado a vivir. Mucho la necesito: mucho
pienso en Vd.: nunca he pensado tanto en Vd.: nunca he deseado tanto
tenerla aquí. No puede ser. Pobreza. Miedo al frío. Pena del encierro
en que la habría de tener. Pena de tenerla y no poderla ver, con este
trabajo que no acaba hasta las diez y media de la noche. Bueno: los
tiempos son malos, pero su hijo es bueno. -Nada más ahora: Vd. lo sabe
todo: esta palabra de hijo me quema. Lea ese libro de versos: empiece
a leerlo por la página 51. Es pequeño -es mi vida. Pero no crea que se
afloja, ni que corre riesgo ninguno, ni que está en salud peor de lo
que estaba este hijo que nunca la ha querido tanto como ahora.-
José Martí |
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