Al menos 13 detenidos en la base
naval de Guantánamo, Cuba, mantienen hoy una huelga de hambre en
protesta por las condiciones infrahumanas a que los someten las
autoridades estadounidenses.
El diario The New York Times informa en su versión digital que los
guardias norteamericanos alimentan por la fuerza a los manifestantes a
través de tubos.
Los reclusos permanecen confinados en un área de máxima seguridad
de la base, ubicada en el oriente cubano en contra de la voluntad del
pueblo y gobierno de la isla.
Según el rotativo neoyorquino, 160 prisioneros, de un total de 385,
fueron trasladados desde diciembre hacia el nuevo recinto, donde los
mantienen en celdas reducidas 22 horas al día.
"Deseo morir, estamos viviendo una situación agonizante", refirió a
su abogado Adnan Farhan Abdullafit, un recluso yemenita de 27 años de
edad.
Las huelgas de hambre como método de protesta comenzaron casi desde
el momento en que los oficiales del Pentágono instalaron a los
prisioneros en Guantánamo en enero de 2002.
En diciembre de 2005, unos 130 reos presionaban a través de ayunos
para atraer la atención internacional hacia las injusticias de que son
víctimas.
Las autoridades del recinto militar decidieron entonces amarrar y
entubar a los huelguistas para pasarle los alimentos, con lo cual,
aumentó la indignación de la opinión pública.