La asistencia humanitaria llega hoy a 50 mil
de las más de 84 mil familias bolivianas damnificadas por los
desastres asociados al fenómeno climatológico de El Niño, informó la
Defensa Civil.
Los reportes señalan que debido a los azotes del temporal, sobre
todo las inundaciones, se registran hasta ahora 53 fallecidos y seis
desaparecidos.
Los territorios más golpeados son los departamentos de Santa Cruz
(oriente) y Beni (noreste), afirmó el general Gonzalo Lora, quien
anunció que organismos regionales ayudan al ejecutivo a evaluar los
daños totales tras la emergencia.
Lora señaló que con el apoyo de las Fuerzas Armadas también se
prioriza la atención a los afectados en la norteña región de Pando,
sin descuidar lo que sucede en La Paz, Oruro y Potosí.
Hasta el momento, Santa Cruz es la zona más dañada, con 18 mil 886
familias afectadas.
Asimismo se transportan alimentos y vituallas hacia Beni, la región
de mayor riesgo debido a las riadas y las inundaciones, las cuales
afectan a varias provincias, incluida la ciudad de Trinidad.
Lora explicó que la cooperación internacional se ha incrementado en
las últimas horas, sobre todo con envíos del Programa Mundial de
Alimentos.
También subrayó una donación de 3,5 toneladas de alimentos
entregada por el gobierno de Francia.
Por su parte, representantes de la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (CEPAL) llegaron a Bolivia para coadyuvar con el
gobierno en la evaluación de los daños.
El ministro de Planificación del Desarrollo, Gabriel Loza, adelantó
a Prensa Latina que se realizará un estudio general de los problemas
que causó el fenómeno climatológico natural.
Mediante la suscripción de un convenio, el organismo multilateral
otorga a Bolivia una donación de 200 mil dólares para atender las
emergencias y realizar esas investigaciones, precisó.
También se hará una valoración técnica, social, ambiental y
económica de los daños causados por el fenómeno natural, con el objeto
de orientar los procesos de rehabilitación, recuperación y
reconstrucción post desastre.
La Misión de CEPAL trabajará en la elaboración de propuestas,
obras, actividades y acciones de reconstrucción.
Loza precisó además que existe información exacta sobre las
pérdidas en la capacidad productiva, en los sistemas de agua potable,
casas, escuelas y ganadería.
Los expertos evaluadores laborarán en las especialidades de
caminos, saneamiento básico y agricultura, entre otras, y comprobarán
la incidencia de la tragedia en la capacidad de crecimiento del país.