RAMALLAH, 28
de febrero.— Tres palestinos murieron hoy en una incursión en Jenín
del ejército israelí, que ha vuelto a ocupar el casco antiguo de
Nablus y declarado el toque de queda, reportó EFE.
En varios puntos de la zona, habitada por unos 50 000 vecinos, se
registraron tiroteos entre los soldados y los milicianos palestinos.
Testigos oculares informaban esta tarde que los afectados por el
toque de queda también se hallaban sin electricidad en sus casas. La
Universidad A-Najah, las mezquitas y las escuelas, así como los
comercios, estaban cerrados mientras los soldados buscaban casa por
casa.
La jefa de servicios médicos de Nablus, Ghazan Hamdán, informó que
los soldados israelíes regresaron con 150 todoterrenos y tenían de
hecho bajo control a sus 180 000 habitantes, y las áreas de los tres
hospitales de la ciudad.