En menos de un mes, médicos cubanos atendieron a más de 70 mil
personas y superaron el millar de acciones de educación para la salud
en las zonas de desastre asociadas en Bolivia al fenómeno
climatológico El Niño.
Rafael Dausá, embajador cubano en el país, aseveró que los más de
400 galenos de la Isla que prestan servicios en esas regiones ponen a
disposición de la población novedosos sistemas para prevenir
enfermedades trasmisibles y llevan consigo cinco toneladas de
medicamentos e insumos médicos.
Señaló que en los Departamentos de Beni, Santa Cruz, Cochabamba
Tarija, Potosí, Chuquisaca y La Paz los colaboradores de la nación
caribeña ofrecen laboratorios para el diagnóstico de virus, una
tecnología que brinda datos con un 98 por ciento de especificidad en
sus determinaciones.
Luego de encomiar la alta disposición del personal médico, precisó
el diplomático que desde que comenzó el temporal, sobre todo las
intensas precipitaciones e inundaciones, los galenos cubanos se
desplazaron hacia las zonas más dañadas, con el objetivo de
desarrollar su labor asistencial y profiláctica.
Actualmente más de 100 de ellos conviven con los evacuados en 30
campamentos de Beni y Santa Cruz, donde las principales enfermedades
tratadas han sido las respiratorias agudas, parasitismo, infecciones
de la piel y las diarreicas, con mayor impacto en menores de 15 años.
Estos profesionales de la salud arribaron desde el 2 de febrero de
2006 a Bolivia, como parte del Contingente Internacional cubano 'Henry
Reeve', de Médicos Especializados en Situaciones de Desastre y Graves
Epidemias.
Precisamente ellos llegaron ante una situación de emergencia
similar, que afectó a más de 40 mil familias, y a mediados de enero
pasado igualmente respondieron a un llamado de idéntica condición.
El Contingente está compuesto actualmente por mil 750 profesionales
de la salud, quienes trabajan en 236 municipios de los nueve
Departamentos bolivianos.