Venezuela ratifica la solicitud de extradición del terrorista Luis
Posada Carriles formulada al gobierno de Estados Unidos, donde es
encausado por fraude migratorio, afirmó hoy el abogado José Pertierra.
En declaraciones al programa En Confianza, de Venezolana de
Televisión, Pertierra, quien representa al país sudamericano en el
caso, señaló que la ley no da a Washington otra opción que
extraditarlo o procesarlo, refiere un despacho de Prensa Latina.
Lo único que pudiera detener los procedimientos es otra causa penal
bajo cargos distintos a los de terrorismo, agregó.
La administración estadounidense ha imputado a Posada Carriles
siete cargos por fraude migratorio, delito por el que podría enfrentar
una pena de 40 años de prisión, pero no lo pretende juzgar por los
crímenes cometidos.
En tal sentido, Pertierra admitió que resulta decepcionante
procesar a un terrorista por mentiroso en lugar de por su autoría en
el sabotaje contra una nave de Cubana de Aviación en 1976.
Familiares de las víctimas del avión civil soboteado en pleno vuelo
han declarado que aceptar un juicio al connotado terrorista
internacional Luis Posada Carriles, presentado sólo como un inocuo
mentiroso, es admitir la peregrina idea de que sus seres allegados
nunca murieron masacrados.
El abogado destacó que la Convención de Montreal (Canadá) sobre
aviación civil abre la posibilidad de que Posadas Carriles sea
enjuiciado por un crimen cometido en el país que solicita su
extradición.
Pertierra recordó, además, que los crímenes de Posada incluyen la
organización de atentados contra instalaciones turísticas en Cuba
mediante mercenarios centroamericanos, a los cuales pagó para colocar
bombas en hoteles.
Uno de esos artefactos, indicó, causó la muerte al turista italiano
Fabio Di Celmo y precisamente hay un Gran Jurado en uno de los estados
norteamericanos examinando las evidencias para determinar si lo
encausan por conspiración para cometer terrorismo y homicidio.
En entrevista con los periodistas Ann Louise Bardach y Larry Rother,
del diario New York Times, el 12 de julio de 1998, Posada Carriles
admitió su autoría intelectual del atentado que costó la vida a Di
Celmo y reconoció el financiado del hecho por la Fundación Nacional
Cubano Americana.